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Libros escritos por Sai Baba

28. Conocimientos directos e indirectos

La enseñanza es de dos clases: indirecta y directa. La primera es la que se efectúa por medio de los Vedas y los vedantas, deducción e inducción, razonamiento e inferencia. Cuando este entendimiento se experimenta y realiza, se vuelve directa. El Absoluto Universal, que es Verdad, Conocimiento y Bienaventuranza, es evidente por sí mismo, por lo que su comprensión a lo más es sólo indirecta. Visto desde cierto ángulo, Brahman no conoce ni directa ni indirectamente; es único, más allá de ambos. Para obtener el conocimiento directo del Absoluto, el primer requisito es la práctica espiritual. Su primer paso es el servicio con entrega y fe completas que se ofrece al verdadero maestro.

Este, a su vez, deberá instruir siempre al aspirante en forma sencilla sobre la naturaleza de Brahman. Cuando el discípulo asimila esta enseñanza, se vuelve conocimiento indirecto. A su vez, este conocimiento indirecto puede transformarse en conocimiento directo a través de la constante reflexión. El conocimiento indirecto es tan cambiante como las letras que se dibujan sobre el agua, mientras que el conocimiento obtenido en la forma directa es indeleble como las letras esculpidas sobre la roca.

Cuando se escucha decir "caballo", la figura de este animal se dibuja en la mente; si la palabra es Brahman sucederá lo mismo, la naturaleza de éste aparecerá en la conciencia. Los versados en los primeros principios de la disciplina espiritual le llaman a lo anterior meditación. Para encontrar la estabilidad en la meditación el aspirante debe cultivar el control de los sentidos y las pasiones, y no olvidar la actitud de la renunciación a los frutos del trabajo. Quien sea un seguidor de estas virtudes, puede ver fácilmente con el ojo mental la forma de Brahman tan pronto como oye la descripción de su naturaleza. Y reiterando lo dicho anteriormente, la renunciación a los frutos de las acciones debe conservar su carácter de esencial. Cuando este desapego está bien arraigado, la conciencia se vuelve pura y el alejamiento de los sentidos del mundo objetivo se hace posible.