.



 

Libros escritos por Sai Baba

04. Eliminando egoísmo y deseo, obtén la liberación conquistando la mente

04. Elimina el egoísmo y el deseo y obtén la liberación conquistando la mente.

* * * * * * * * * * * * * * * * *

Cuando sale el Sol desaparecen la oscuridad y sus inconvenientes. Igualmente, para aquellos que han reconocido el Alma no hay ninguna atadura, pena o dolor proveniente del apego. La ilusión surge solamente en aquellos que olvidan sus referencias espirituales. El egoísmo es la principal causa que provoca que la gente se olvide de su Verdad esencial. Una vez que el egoísmo entra en el hombre, éste se aleja del ideal y se precipita desde lo alto de la escala humana en una rápida caída, peldaño tras peldaño, hasta el mismísimo suelo, hasta su más baja condición.

El egoísmo crea antagonismos, odios y apegos. A través de los apegos y los afectos y también a través de la envidia y el odio, uno se interna en la actividad hundiéndose en el mundo. Esto conduce a una identificación cada vez mayor con el cuerpo físico, incrementándose así el egoísmo. Con el fin de liberarse de la doble atadura del placer y el dolor, uno tiene que desembarazarse de la conciencia del cuerpo físico y permanecer limpio de acciones egocéntricas. Tal cosa requiere de la ausencia de apegos y odios. El deseo es el enemigo número uno de la Liberación o "moksha". El deseo puede atarlos al ciclo de nacimientos y muertes, trayendo además consigo innumerables preocupaciones y penas.

Por medio de la reflexión en las cuatro trabas que ya les he ilustrado, su conocimiento se volverá más claro y brillante y obtendrán la Liberación. "Moksha" es sólo otra palabra más para denominar a la independencia que no está sometida a ninguna persona o cosa exterior.

Si la mente es controlada y ejercitada con precisión, podrán alcanzar la Liberación (moksha); por tal motivo, deben saturarse con pensamientos acerca de Dios, lo cual les ayudará a discernir los interrogantes acerca de la naturaleza de la realidad. Cuando la mente se haya purificado y esté libre de ataduras, la conciencia del ego desaparecerá por sí sola. No ser afectado en ninguna forma por el mundo: ése es el sendero de la autorrealización, la cual no puede ser adquirida en el cielo o el monte Kailasa, excepto en el propio ser interno de cada uno.

La llama del deseo no puede ser extinguida sin la conquista de la mente. La mente no puede ser dominada si no se apagan las llamas del deseo. La mente es la semilla, el deseo es el árbol. Solamente el conocimiento de la esencia del Alma puede arrancar de raíz ese árbol. De esa manera, la mente, los deseos y el Conocimiento del Alma son interdependientes.