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Discursos dados por Sai Baba

23. 13/06/73 La verdadera naturaleza de la Rectitud

La verdadera naturaleza de la Rectitud

La verdadera naturaleza de la Rectitud

13 de Junio de 1973

No pueden esperar obtener buenos resultados después de haber incurrido en un acto negativo. Después de haber hecho algo bueno, no tienen por qué temer algún resultado adverso. Si plantan semillas de limoneros, ¡cómo podrían obtener otros frutos que no sean limones! Todas las formas y todas las religiones se relacionan con El. El está presente en todos los ídolos que adoramos. ¡Estudiantes!: En este mundo infinito hay incalculables seres individuales. Entre todos ellos el hombre reina supremo. En tanto que cosas como el comer y el dormir son comunes a todos los seres vivientes, el hombre se distingue de los demás por dos aspectos. Uno es la Conducta Correcta y la otra, la Sabiduría. Si no se encontraran en el hombre, también habría de ser clasificado entre las otras cosas vivientes.

Ante todo debiéramos inquirir respecto de qué significa Dharma. El Dharma o la Rectitud le ordena al hombre acatar ciertas normas de conducta para el progreso social y espiritual. Puede considerarse que es la observancia de tales restricciones y disciplinas. La Acción Correcta puede resultarle lesiva a las personas que busquen menoscabarla, y, por el contrario, protegerá a todos quienes la protejan. Otra sagrada virtud del Dharma o Rectitud es que atrae la victoria hacia cualquiera sea el punto en que se encuentre. Son muchos los ancestros de este país que han comentado esta sacra palabra. Esta tierra ha sido tan bien atada con la soga de la Rectitud que muestra rasgos distintivos y le sirve de ejemplo a otros países. En realidad, esta palabra Dharma o Rectitud está ligada a una infinita variedad de sentidos y, en la época actual, se la describe muy inadecuadamente por medio de un solo término: deber. El deber es algo conectado a un individuo, un predicamento, época o país en particular. Aunque, por otra parte, la Rectitud es eterna e igual para todos en todas partes. Simboliza el valor del Alma interna. El lugar de nacimiento de la Rectitud es el corazón. Lo que emana del corazón como una idea pura será llamada Acción Correcta cuando se traduce en la acción. Si hubiera de decirlo en una forma que puedan entender, podría resumirlo diciendo "actúen respecto de los demás tal como quisieran que se actuase con ustedes". Esto es el Dharma o la Rectitud. El Dharma consiste en evitar acciones que puedan herir a otros. Sabiendo lo que les hace felices a ustedes, deberán hacer aquello que sea causa de felicidad para otros. Si nos damos cuenta de que lo que hacen otros va a crear dificultades y lo hacemos también, ello sería contrario a la Rectitud.

Hay oportunidades en que, bajo ciertas circunstancias, hay que increpar con dureza a un individuo que haya cometido una injusticia, con el objeto de que se enmiende. El que uno haga uso de un cuchillo a veces, no puede llevarnos a concluir sin más que se trata de un acto malvado o que sea una persona cruel. Un médica, por ejemplo, puede hacer uso de un cuchillo y abrirle el corazón a alguien mientras realiza una operación. ¿Lo llamaremos un acto de crueldad o una ayuda? Si lo que hacen tiene conexión con lo falso, podría llamarse contrario a la Rectitud. Pero no se puede etiquetar así ninguna acción que lleven a cabo con amor. La ley equivale al amor y todo el sistema legal se basa en el amor. Si por ejemplo, un niño comete una equivocación y la niadre lo golpea, ¿lo llamarían crueldad o falta de Rectitud? Según los casos, la Rectitud ha adquirido muchos significados distintos. Puede referirse a la época, al mundo, al corazón, a una secta, ete. Hay variedades de Acciones Correctas que se han generalizado en los tiempos actuales. La forma combinada y la esencia de todas ellas es la Justicia Eterna, y es en este contexto que podemos decir que todas las religiones son Suyas y todas las formas son .Suyas. Cualquiera sea el Dharma de que se trate, jamás les enseñará a mostrarse irrespetuosos para con sus padres o sus maestros. Nunca les dirá que pronuncien falsedades. Todas las religiones han tenido mucho en común y ello es lo bueno que tienen todas. No obstante, lo que hemos estado haciendo nosotros es descuidar lo que ha sido común a todas las religiones. Por otra parte, nuestra atención ha sida atraída por todo aquello que ninguna de las religiones ha dicho nunca. Esta es la razón por la cual hemos tomado por la senda de "la falta de Rectitud". Si cada uno desarrollara fe en su propia religión y pusiera en práctica todo lo que ella haya dicho, no habría lugar para todas las diferencias de opinión que han surgido ahora, ni para esa forma inculta y carente de educación de la que a menudo hablamos. Dicen profesar una religión, mas si en la vida diaria actúan de manera que la contradice, muestran a las claras la poca fe que sienten por cualquier religión. Si tuvieran real fe en la religión que dices profesar, no se daría ninguna oportunidad para que se comportaran de un modo que contraría su contenido. Cuando las declaraciones se manifiestan divorciadas de la práctica, aparecen sólo como un atavío externo. Esto en sí mismo "es contrario a la Rectitud". Toda nuestra devoción y nuestra fe no son sino apariencias hoy en día. No están realmente en ustedes. S; vamos a cualquier lugar de culto o de peregrinación, damos grandes muestras de devoción, pero cuando nos vamos de estos lugares, toda esta devoción y esa fe se quedan atrás. Es en este contexto que el Bhagavad Gita dice: "Han de ser siempre y en todo lugar un yogui y un devoto". Nuestras virtudes salen a relucir únicamente cuando hacemos culto devocional y oración. Tan pronto salimos del culto devocional, nos despojamos de ellas. Las virtudes no deberían estar atadas a un momento o lugar en particular; han de ser observadas durante toda la vida de uno.

Había un individuo que debía cubrir una distancia de diez millas en la noche. Llevaba una linterna, pero su luz alumbraba sólo a unos cuatro o cinco metros del camino. Al internarse en el bosque, se comenzó a preguntar cómo podría terminar su recorrido con esa linterna que alumbraba tan poco. En esos momentos le alcanzó un renunciante que iba en la misma dirección y le preguntó por el motivo de su inquietud. El hombre le expuso que tenía que cubrir una larga distancia con esa linterna que no alumbraba sino a unos cuantos pasos. El renunciante le aseguró que llevando esa luz consigo, ella le mostraría el camino a lo largo de todo el recorrido. De manera similar, la conducta virtuosa que observemos, nos ayudará a atravesar toda nuestra vida. Puede que duden de la Omnipresencia de Dios, pero si toman conciencia de que sus propios cuerpos son el templo de Dios, que sus corazones son el asiento de Dios y que el Alma Individual dentro de ustedes no es más que un reflejo de Dios, entonces vuestro cuerpo será vuestro lugar de meditación y, de ese modo, el Señor estará presente adondequiera que vayan. Es así que habrán de ver lo Divino en todas las obras que lleven a cabo, en todos los individuos que encuentren y en todos los pensamientos que alberguen, y deberán actuar de acuerdo con esto. Para que puedan adquirir estas buenas cualidades, han de desarrollar la fe y seguir los caminos indicados por los textos sagrados como el Bhagavad Gita, el Mahabharatha, el Ramayana, la Biblia o el Corán.

Cuando pensamos en Iswara, de inmediato nos imaginamos a alguien que lleva el cabello atado en un rodete sobre la cabeza, que blande un tridente en la mano, que tiene tres ojos y que se cubre con una piel de leopardo. Iswara, en realidad, significa alguien que es un elevadísimo ser, como Maheswara y que encierra en sí todas las fbrmas de prosperidad. Se debe a la volición o voluntad divina de Maheswara el que creamos que se está produciendo la creación, la mantención y la disolución del mundo creado. Es usual que se describa a Maheswara como conformado por tres partes: Shiva, Vishnu y Rudra. El nombre de Shiva significa que él nos da felicidad y prosperidad. Por otra parte, también es Shiva quien nos muestra la senda correcta relativa a la Sabiduría, al éxito y el que nos otorga varios tipos de riquezas, debido a lo cual también se le llama Sankara. La palabra "Sankara" ha de entenderse como formada por dos partes: "San" y "xara". "Kara" significa hacer entrega de algo, y "San" todo tipo de riqueza. De modo que el que nos hace entrega de todo tipo de riqueza y de éxito, es Sankara. Fue respecto de estos sagrados significados que les hablara anteriormente sobre las tres clases de conocimiento: externo, sutil y del espíritu interno. Mencioné también que el conocimiento externo le obliga a uno, el conocimiento sutil obliga a los demás y el conocimiento del Ser interior los libera a todos. Hay gente que alberga dudas respecto a cómo el conocimiento sutil puede amarrar a otros. Haciendo uso de las riquezas, uno puede tratar de dominar a otros obligándoles. La palabra riqueza encierra aquí un significado muy amplio. Podemos obligar a otros con la riqueza cuando ésta se da en forma de dinero. Podemos obligar a otros con la riqueza cuando ésta toma la forma del amor. Estas son diferentes formas de riqueza. También pueden obligar a otros con la Sabiduría. Se dice que "el devoto puede obligar a Dios por medio de su devoción". Por ende, este concepto de que la riqueza que otorga Iswara en tantas formas diferentes puede ser empleada para obligarlo a uno, viene a ser algo que responde a la doble naturaleza de no ser ni verdad ni falsedad. Es una concepción que se ubica entre la una y la otra. Aquel que ha adquirido la riqueza de la Sabiduría y se hace idéntico con ella, se torna en un ser muy feliz y se habla de él como del "Tat eva twani". Esto significa que esta persona está sumida en la dicha y es una con el objeto de su Sabiduría. A este estado se le denomina "Twani eva tat". En ambos enunciados podrán observar que un sitio le corresponde al Gurú y el otro, al discípulo. Aquel que ocupa el lugar del Tat, de lo Divino, y que explica el significado del Twani, del "Yo", será el Maestro. El que ocupa el lugar del "Yo" y está indagando sobre la "naturaleza de lo Divino", será el pupilo. Un Maestro también está en el lugar de la Esencia Divina, y el estudiante reside muy próximo a él. Tiene la oportunidad de recibir así buenas ideas. Cuando se encuentran en la proximidad de algo bueno, habrán de tratar de conseguir la naturaleza de aquella cosa buena. En estas circunstancias, el estudiante recibe la oportunidad de llegar a ser uno con el Maestro y pasar al estado de renunciación espiritual.

Si he de hacer que este concepto resulte fácil y claramente comprensible, debo llamar vuestra atención sobre la práctica que existe en nuestro país del "upavasa" es decir, de "vivir en la constante presencia de Dios". Para llegar a su significado, hemos de entender la diferencia entre "upasana" y "upavasa". "Upavasa" es vivir muy cerca. "Upasana" es estar sentado muy cerca. No sentimos calor cuando estamos sentados cerca de un equipo de aire acondicionado. Similarmente, en invierno nos sentamos cerca del calefactor y recibimos los beneficios del calor. Realizamos el "upavasa" porque deseamos aproximarnos a Dios y permanecer cerca de El. ¿Cuál es la ventaja de aproximarse a Dios? El beneficio que implica es que el Eterno Absoluto Universal de Dios pasará a nosotros, y las malas cualidades que haya en nosotros desaparecerán. Esta es la forma en que hemos de entender el significado de "vivir en la constante presencia del Señor".

Tenemos la intención de acercarnos a Dios, mas en la práctica lo hemos reducido a comer media docena de panes, una docena de bananas y tomar medio litro de leche, después de refrenarnos de comer arroz. ¿Tendrá algún sentido este tipo de "upavasa"? Es obvio que de esta manera no comprendamos el correcto significado de nuestra sagrada cultura. Hasta cierto punto, nos sentimos, así, desilusionados por los resultados que nos rinden nuestra disciplina espiritual y nuestras prácticas.

¡Estudiantes!: han venido aquí para este curso de verano y se quedan con el específico propósito de entender la Verdad. Deben grabar en sus corazones la verdad sobre estas cosas y difundirla entre sus amigos, cuando vuelvan a sus casas. Deberán trabajar por que el futuro de nuestro país se reconstruya sobre estos firmes cimientos. Les bendigo y doy fin a este discurso.