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Discursos dados por Sai Baba

02. 23/02/06 El control de los sentidos es el verdadero sadhana

EL CONTROL DE LOS SENTIDOS ES EL VERDADERO SADHANA

EL CONTROL DE LOS SENTIDOS ES EL VERDADERO SADHANA

23 de Febrero de 2006

Escuela Secundaria Superior

Discurso a los Estudiantes

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¡Encarnaciones del Amor!

Mis bendiciones para todos ustedes. Estoy feliz de que todos ustedes hayan estudiado aquí desde la escuela primaria hasta el grado 12, hayan obtenido buenas notas y ganado un buen nombre. Sin duda, todos han tenido buen comportamiento y buen carácter hasta la etapa de la Primaria. Sin embargo, después de dejarla, pueden ver por sí mismos el cambio que se ha producido en ustedes. Mientras estaban en la Escuela Primaria desarrollaron muchas buenas cualidades como el amor, la compasión, la bondad y la alegría. Todos se comportaban como hermanos, con amor y afecto mutuo. Sus palabras, sus juegos, sus canciones estaban todos llenos de dulzura. Pero en cuanto llegaron a la Escuela Secundaria Superior, la calidad de la pureza en sus pensamientos, palabras y acciones se deterioró. Yo no estoy diciendo que todos los muchachos son así. Solamente unos pocos tomaron caminos equivocados y están dañando sus mentes. Pueden juzgar por sí mismos cuán pura es su mente. La condición humana consiste de cinco componentes: el cuerpo denso, la mente, el intelecto, la conciencia y los sentidos. Si un ser humano ha de alcanzar la liberación, él debe primero limpiar su mente. Es un serio error el desear lo que no le pertenece a uno. Siempre que la mente desee algo, deben inquirir primero si el objeto particular les pertenece a ustedes o a otro. Cuando sepan con seguridad que pertenece a otra persona, deben tener el cuidado de desviar su mente de ese objeto. La mente ha de ser mantenida absolutamente pura y sagrada. No deben manchar la mente con las impurezas de los conflictos y la agitación. Todos deben desarrollar esa clase de conocimiento (jñâna) desde esta temprana edad. Desgraciadamente, hoy en día todos están dañando sus vidas cultivando deseos por toda clase de cosas. Esto es una locura y un engaño. Hagan lo que hagan, deben hacerlo con un sentido de dedicación y rendición a Dios. Todo el trabajo que emprendan deben ejecutarlo con este espíritu. “Hagan todas las acciones para complacer a Dios” (Sarva karma Bhagavad prîtyartham). De hecho, lo que piensan que es de ustedes, no lo es. Ante todo indaguen dentro de sí: “¿Quién soy yo?” El universo entero, desde el microcosmos hasta el macrocosmos, está saturado por la Divinidad. El azúcar, la arena, la hormiga, el mosquito o el elefante: todos son encarnaciones de la Divinidad. Dios está asumiendo todas estas formas, como los diferentes personajes en una obra de teatro. No hay nada en este universo que no esté saturado por Dios. Todo en este universo es Dios. La creación entera es una Encarnación de la Divinidad. De hecho, Él asume todos los personajes en este drama cósmico. Todos los diálogos y canciones son Suyas únicamente. Sin embargo, los personajes que Él asume parecen ser diferentes. Por ende, cualquier cosa que hagamos, veamos y digamos es todo Dios. Deben tomar conciencia de esta verdad y conducirse en consecuencia.

Desafortunadamente, hoy en día algunas personas toman caminos equivocados debido al efecto de las malas cualidades, las malas prácticas, los malos pensamientos y las malas miradas. A quienquiera que encuentren, trátenlos como Encarnaciones de la Divinidad. Cualquier cosa que digan, debe reflejar la Divinidad. Si se conducen de tal manera, eso en sí es liberación (mukti). Deben limpiar sus cinco sentidos. Deben conducirse de tal manera que no dañen a otros ni sean dañados por otros. Las palabras que usen deben ser sagradas. No deben codiciar los bienes de otros ni desarrollar un deseo por ellos. Deben cultivar la fe en la unidad de la Divinidad. Todo es Divino. Desgraciadamente, algunos muchachos no son capaces de desarrollar esa perspectiva universal. Decaen en un sentimiento de separatividad. Distinguen a las personas como ‘mías’ y ‘tuyas’. La antigua historia de la India está repleta de instancias de los malos efectos de tales tendencias divisivas.

Todos ustedes conocen la historia de los Kauravas y de los Pandavas en la gran epopeya del Mahabharata. Los Kauravas eran cien y eran hijos del rey Dhritarashtra. Los Pandavas eran cinco. Eran hijos de Pandu, el hermano menor del Rey Dhritarashtra. Tuvo lugar una terrible batalla entre los Kauravas y los Pandavas. Sin embargo, ¿quién era el culpable en esta batalla? De hecho, Dhritarashtra y Pandu eran ambos hijos del mismo padre. Eran hermanos. Su reino era uno, pero sus pensamientos y aspiraciones eran diferentes. Un malicioso deseo de los Kauravas de anexar el reino entero para sí resultó en pensamientos malignos y tendencias divisivas. Similarmente, en el Ramayana hubo dos hermanos: Vali y Sugriva. También eran hermanos nacidos del mismo padre, pero intereses desafortunados y egoístas de su parte resultaron en una fiera batalla entre ellos. Mientras Vali, el valiente rey, estaba disfrutando de las comodidades reales en la ciudad de Kishkindha, su hermano menor, Sugriva, tenía que languidecer en las montañas y selvas.

De nada sirve repetir el Nombre de Dios (japa) y llevar a cabo austeridades (tapas) durante meses y años si no se abandonan las tendencias divisivas. Tales austeridades se convierten en mero ejercicio tamásico. Muchas personas abandonan sus prácticas espirituales a mitad de camino con un sentido de frustración y desesperación, pensando que Dios no es suficientemente misericordioso para revelarse antes ellos a pesar de sus largos años de práctica. Si desean tener la visión de Dios, ante todo deben desarrollar un sentido de unidad con Dios. De hecho, su propia mente es una Encarnación de la Divinidad. La gente a menudo pregunta “¿Dónde está Dios?” “¿Quién es Dios?”, etcétera. Yo les diría: “Su mente es Dios”. Se dice que: “La mente es la causa de la esclavitud y de la liberación del hombre” (Mana eva manushyanam karanam bandhamokshayo). Ambas, la esclavitud y la liberación, ocurren debido a la mente únicamente. Por ende, la mente es Dios. Similarmente, el intelecto es Dios, así como también lo es la conciencia (chitta) Es común ver cómo la gente alaba a una persona con intelecto agudo, diciendo que es un intelectual. Pero sólo Dios es el verdadero intelectual. Deben dedicar su conciencia (chitta) a Dios. Una vez un gran devoto cantó: “¡Oh! ¡Dios! Déjame ofrecerte mi adoración con pureza de conciencia (chitta shuddhi)”. Por ende, deben siempre orarle a Dios con pureza de conciencia.

Al igual que la mente, el intelecto y la conciencia son Encarnaciones de la Divinidad, así como también lo son los sentidos. Por ende, no deben mancharse los sentidos con los seis enemigos internos de la lujuria, la ira, la codicia, el engaño, el orgullo y la envidia (arishadvargas). Kâma significa deseos, los cuales ustedes pueden desviar hacia Dios, orando para desear sólo a Dios y a nadie más. Amen a Dios únicamente. Sólo un amor tal será santificado. El amar a las personas en base a su nombre y forma no puede llamarse amor verdadero. Eso es sólo amor mundano. Cuando aman a Dios, todo lo demás les vendrá por añadidura. Todos sus deseos deben orientarse hacia Dios. Cada deseo que tengan debe ser para complacer a Dios. Si aman a alguien, no lo traten como un mero mortal. Deben ser capaces de visualizar a la Divinidad dentro de él.

No hay otro objeto en este universo más que los cinco elementos: el aire, el agua, la tierra, el fuego y el éter (panchabhutas). No encontrarán un sexto elemento, no importa cuanto lo intenten y cuánto traten de explorar. Por ejemplo, esta mano tiene cinco dedos. No hay un sexto dedo. En caso de que alguien tenga un sexto dedo, será llevado al doctor para removerlo mediante cirugía. Similarmente, todos tenemos cinco sentidos. ¿Qué es la liberación (mukti)? La liberación es el control de los sentidos. A menos que controlen sus sentidos, la liberación no será posible. Es tonto pensar que Dios está en alguna parte lejana. Para ser exactos, ¿quién es Dios? Los Panchabhutas son las Encarnaciones de la Divinidad.

Únicamente los sentidos traen lo bueno o lo malo. Por ende, su prioridad debe ser controlar los sentidos. A menudo expresan su incapacidad, pensando: “¡Swami! ¿Es posible para nosotros?” Yo digo enfáticamente que es posible, siempre que ustedes hagan un esfuerzo con firme determinación. Si son capaces de complacer a Dios y obtener Su gracia, el control de los sentidos no es una tarea muy grande para ustedes. Los sentidos son cosas muy triviales. A menos que puedan controlar sus sentidos, no merecen ser llamados seres humanos. Se dice: “De todos los seres vivientes, el nacimiento como ser humano es el más precioso” (Jantunam nara janma durlabham). El nacer como ser humano es un raro don de Dios. Habiendo obtenido este raro don, deben esforzarse por lograr el control de sus sentidos. Aun si sucumben a los deseos de sólo uno de los cinco sentidos, se rebajarán al nivel de un animal. Se dice: “Dios está en la forma de un ser humano” (Daivam manusha rupena). Habiendo alcanzado este raro y sagrado nacimiento como ser humano, ¡qué tonto es decir que no pueden controlar sus sentidos! ¡El que sucumbe a los deseos de los sentidos es verdaderamente un rakshasa, un demonio! De hecho, tal persona es peor que un rakshasa. Deben evolucionar hasta convertirse en nobles seres humanos. Pueden amar mucho a su esposa e hijos, pero no pueden denigrar a otros basándose en esto. No deben abrigar el sentimiento de que fulano es mío y los otros son diferentes. ¡Todos son Encarnaciones de la Divinidad! ¡Todos son Hijos de Dios! Esa es la íntima relación que existe entre la gente en este mundo. Todo lo que encuentran en este mundo pertenece únicamente a Dios. No le pertenece a ningún individuo en particular. En cada objeto, en cada ser, está la Divinidad inmanente. La Divinidad está presente en cada grano de arena y en cada partícula de azúcar. Se dice: “El universo entero es la Encarnación del Señor Vishnu” (Vishvam Vishnu Swarupam). El universo entero es una sola familia. Por ende, deben cultivar tal amor universal. Eso es verdadero Amor Átmico. Solamente cuando cultiven tal amor merecerán ser llamados seres humanos. Sólo entonces podrán visualizar el principio de Atma (Âtma Tattva). Si, carentes de amor, siguen cultivando malas cualidades como la ira, el odio, los celos y un sentimiento de diferencia entre sí, serán peores que los animales. Las bestias y los animales luchan entre sí. Si ustedes también pelean como ellos, ¿cuál es la diferencia entre ustedes y los animales? De hecho, la ira y el odio no son las cualidades de un ser humano. El sentimiento de diferencia se origina en los seres humanos cuando el hombre se considera diferente de Dios. Donde hay sentimiento de diferencia, ahí levanta su cabeza el odio. Cualquier actividad que emprendan, debe hacerse en un espíritu de dedicación a Dios. Se alaba al Señor Ishvara con el mantra “Hiranya Garbhâya Namaha” (Yo ofrezco mis salutaciones al Señor de Útero Dorado”). Él es la encarnación del oro. Aquí, oro significa inmutabilidad. Todos ustedes son niños de oro. Sin embargo, olvidan su verdadera naturaleza y se asocian con el polvo y la herrumbre. Por lo tanto, cada tanto, grandes almas deben tomar nacimiento en este mundo para limpiarlos y hacerles realizar su Divinidad innata. No obstante, cuando alguna gran alma emprende tal misión, algunas personas dudan de su esfuerzo diciendo: “Es sólo su necedad. ¿Puede la tierra volverse oro? ¿Puede la arena volverse azúcar?” ¡El hombre moderno está lleno de dudas! ¿Cuál podría ser la razón de estas dudas? Solamente cuando uno piensa que está separado de Dios es que surgen las dudas.

Es un hecho bien conocido que una vasija llena hasta el tope se mantendrá firme. Similarmente, Dios es omnisciente y, por ende, Él es siempre firme. Muchas personas que vienen aquí tienen diversas experiencias. (Swami llamó a un estudiante al estrado.) Yo conozco el pasado, el presente y el futuro de cada individuo, sin importar casta, religión y lugar de nacimiento. Algunas personas que vienen aquí pueden pensar: “Quizás Swami no sabe quien soy yo”. Pero no hay nada que Yo no sepa. Aun cuando Yo lo sé todo, simulo no saberlo. (Señalando a un estudiante.) Los padres, hermanos y hermanas de este muchacho visitaron Prashanti Nilayam hace algún tiempo. Yo los llamé a todos a una entrevista y le prometí al padre: “¡Querido Mío! La madre de estos niños puede no sobrevivir por mucho tiempo. De hecho, ella puede dar su último aliento antes de que lleguen de regreso a su aldea. Pero no te preocupes. Yo asumiré la responsabilidad de todos tus hijos”. Los niños empezaron a llorar. Yo les dije: “No lloren. ¿Por qué temer si Yo estoy aquí? Yo Me encargaré de todo”. A partir de ese día, he estado cuidando de su bienestar, como prometí. Las muchachas están todas casadas. Todos los hijos han sido provistos de cuanto necesitaban. Ninguno de ellos enfrentó dificultad alguna. Hay un muchacho en nuestra Banda. Él es el menor de todos esos hermanos. Él era muy joven cuando vino aquí con sus padres esa vez. Yo lo llamé y le dije: “¡Querido Mío! No necesitas preocuparte por nada. Yo soy tu padre, madre y todo lo demás. Yo te cuidaré en cada aspecto”. Siempre que venía aquí, Yo solía llamarle y hablarle instilando un sentido de seguridad y confianza en él. Ahora todos los miembros de la familia están viviendo felices. Este muchacho era muy pequeño entonces. Ahora, él ha crecido. Así, he estado derramando Mi amor y gracia sobre todos y cada uno, ya sea que Yo hable personalmente con ellos o no. ¿Cuál es Mi propiedad? ¡El Amor! ¡El Amor! ¡El Amor! No siento ira de ninguna clase contra nadie en ningún momento. Es sólo para corregir a algún individuo descarriado que Yo simulo estar enojado. Sin embargo, Yo no siento ira contra nadie. Mi cuerpo entero está lleno de amor puro. Se dice: “Dios es el Morador interno de todos los seres” (Ishvara sarva bhutanam. ¿Quién es Ishvara? Ishvara no es meramente Aquel que es retratado con una guirnalda de rudrakshas en las manos y serpientes alrededor del cuello. Esa es solamente una forma creada para que el hombre común pueda comprender a la Divinidad en alguna medida. Los diversos nombres y formas como Ishvara, Vishnu, Parvati, Lakshmi, etcétera, fueron creados para ayudar al hombre común a adorar a Dios en alguna u otra forma. De hecho, cada ser humano es una Encarnación de Ishvara. No hay nada en este mundo que no esté saturado por Ishvara. La tierra es Ishvara. Este pañuelo es también una encarnación de Ishvara. Todos los nombres y formas se originaron del Principio de Ishvara (Ishvaratattva)

De hecho, solamente aquel que ha logrado el control de los cinco sentidos puede comprender a la Divinidad. La Divinidad no está limitada a un nombre y una forma La gente dice que tuvo la visión de Rama, Krishna, etcétera, ¡pero es sólo su imaginación! La Divinidad es sólo una y se le ha dado el nombre de Ishvara. Incapaces de comprender a la Divinidad, las personas le asignan diversos nombres y formas y se engañan. Hoy en día, los devotos son los que frecuentemente cambian su deidad escogida. Pero Dios no cambia. Dios es uno. Es permanente. La verdadera práctica espiritual (sadhana) es obtener el control sobre los cinco sentidos. Deben emprender este tipo de sadhana en vez de dedicarse a hacer japa (la repetición del nombre), dhyana (la meditación), etcétera. Por ejemplo, aun si se dedican a hacer japa y dhyana, cerrando los ojos, su ‘mente de mono’ estará divagando por los tres mundos. La gente no se da cuenta de esta verdad y se dedica a diferentes tipos de sadhana. No hay nada más que Divinidad en este mundo. Todo lo que ven, todo lo que oyen, todo está saturado por la Divinidad.

Una vez, los Pandavas estaban llevando a cabo el sacrificio Rajasuya Yajña. A la conclusión del ritual, el Señor Krishna fue honrado por los Pandavas en presencia de todos los reyes en la corte. Shishupala no pudo soportar este honor otorgado al Señor Krishna. Él injurió al Señor Krishna de muchas maneras, criticándolo por diversas omisiones y comisiones. Uno de los puntos de su crítica fue que Krishna había robado los saris de mujeres que se estaban bañando en un lago. Los Pandavas no pudieron soportar estas insinuaciones sobre su amado Señor Krishna. Se sintieron humillados. Krishna entonces trató de razonar con ellos diciendo: “Él lo hizo debido a su ignorancia. Yo estoy más allá de la alabanza o el desprecio. Yo soy el eterno testigo de todo lo que sucede en este mundo. Por lo tanto, no deben responder a esa crítica y empezar a pagarle con su propia moneda. Nunca se apeguen profundamente a nadie. Si viven una vida de desapego tal, Yo estaré constantemente con ustedes cuidándolos y guiándolos”.

La Divinidad nunca alienta las diferencias entre los hombres. Dios es Amor y el Amor es Dios. En este Salón están reunidos varios miles de personas. Sin embargo, el amor que satura a cada individuo es sólo uno. Puede haber diferencias en los nombres y formas de las personas y sus relaciones, pero la Divinidad que satura a todas las personas es una y la misma. Por lo tanto, todos deben llevar vidas llenas de amor, como hermanos y hermanas. En las instituciones educativas donde el sistema de coeducación está en boga, los muchachos y las muchachas deben moverse como hermanos y hermanas. En ninguna parte debe surgir diferencia alguna debido al género. Cuando los niños llegan a la etapa de la Escuela Secundaria, estas diferencias aparecen. No deben darle lugar a tales cosas. Quien abrigue tales diferencias seguro que fallará en un examen: el examen del ‘amor puro’. No hay nada grande en pasar los exámenes en el sentido mundano. Cualquiera puede pasar, siempre que ponga un poco de esfuerzo. De nada sirve pasar un examen mundano si al mismo tiempo está fallando en el amor puro e inmaculado por otro ser humano, que no es otro que Dios. Quien haya pasado el examen del amor divino es la persona más exitosa en la vida.

Todos son hijos de Dios. Todos son reflejos del Hiranyagarbha presente en el cuerpo humano. Por lo tanto, a partir de ahora todos ustedes deben vivir como hermanos y hermanas, con amor y afecto mutuo. Sólo entonces merecerán llamarse estudiantes ideales. Sin embargo, Yo no encuentro en los estudiantes de ahora tal sentimiento de hermandad. En lugar de ello están cultivando diferencias tales como “yo soy diferente” y ‘tú eres diferente”. No deben, bajo ninguna circunstancias, cultivar la ira y el odio. La ira debe ser controlada y el odio desechado. Su seguridad y bienestar residen en controlar la ira. Se sabe que cuando los controles en una estación de ferrocarril no funcionan apropiadamente, los trenes que se mueven en los rieles se descarrilan. En tal situación, el controlador de la estación de ferrocarril es responsabilizado. Similarmente, la mente es el controlador de todos los pensamientos y sentimientos que surgen dentro de nosotros. Por ende, si la mente es mantenida bajo control, el cuerpo entero cae bajo nuestro control.

Todos son encarnaciones de oro puro. Todos son niños de oro. Sus palabras son dulces. Que su conducta también sea dulce de conformidad con sus palabras. Dondequiera que vayan, como estudiantes de las Instituciones Educativas Sri Sathya Sai, deben mostrar una conducta y comportamiento ejemplares. Por el mero hecho de llevar ropas blancas, no merecen ser llamados estudiantes de las Instituciones Educativas Sri Sathya Sai. De acuerdo con su vestido blanco, mantengan su mente pura y su corazón sagrado. Sólo entonces se volverán estudiantes ideales. Swami estará siempre con tales estudiantes, cuidándolos y guiándolos. Yo les daré todo. De hecho, Yo estoy protegiendo a diversas personas de diversas maneras, pero nadie se ha dado cuenta de este punto hasta ahora.

Su propio Âtma es la Divinidad. Es Ishvara. Deben desarrollar firme fe en ese sentimiento. ¿Cómo pueden ser llamados seres humanos si no desarrollan tal fe? El amor es Dios; vivan en amor. Su amor no debe limitarse a un individuo o a algunos miembros de la familia. Deben compartirlo con todos. Sólo si desarrollan tal amplitud de mente, podrán volverse líderes y establecer un ideal para los demás. (Cuando Swami preguntó a los estudiantes si tenían fe en las palabras de Swami, todos ellos respondieron por unanimidad en voz alta: “¡Sí Swami!”) No es suficiente si sólo dicen ‘sí’ de la boca para fuera. La convicción debe venir de la profundidad de su corazón. Ustedes cometen un error y dicen ‘lo siento’. Esto no es suficiente. Deben desistir de repetir el mismo error. La verdad es el mismo aliento vital de un ser humano. La verdad es Dios. No digan mentiras. Solamente si siguen la verdad en su vida con firmeza, pueden lograr cualquier cosa. La verdad es como un escudo que los protegerá. La verdad es su soporte. Si abandonan esa noble cualidad de la verdad y dicen mentiras, ¿cómo pueden ser llamados seres humanos? Nunca deben darle lugar a la falsedad en su vida. Dios es el único líder de todo el universo. Dios es el único líder y juez. Sólo Dios puede decidir la justicia o la injusticia. No deben olvidar a tal omnipresente, omnipotente y omnisciente Dios. No abriguen sentimientos de diferencia como ‘lo mío’ y ‘lo tuyo’. Desarrollen ecuanimidad. ¡Que todas las personas puedan vivir juntas felices y obtener buen nombre para sí mismas y para el país! (Bhagavan creó un anillo de oro con una piedra verde engastada en él y se lo regaló al estudiante parado delante de Él.) Todos deben obtener así la gracia de Dios. El color verde es señal de paz y bienestar. Yo deseo que todos ustedes obtengan tal paz, bienestar, amor, devoción y gracia de Dios. Solamente cuando eliminen las malas cualidades en ustedes, serán capaces de vivir en la divina presencia. ¡Que hagan uso apropiado de los cinco elementos (panchabhutas), la tierra, el agua, el fuego, el aire y el éter! ¡Que controlen sus cinco sentidos (panchendriyas)! Entonces Dios estará constantemente con ustedes protegiéndolos y guiándolos. La Divinidad no puede alcanzarse meramente ofreciendo oraciones y cantando bhajans. Junto con estas prácticas, deben también desarrollar un corazón puro y ofrecerlo a Dios. ¡Que su mente, intelecto y conciencia (chitta) estén constantemente asociados con Dios dondequiera que se encuentren y cualquiera que sea el trabajo que emprendan! Entonces su misma mente, intelecto y conciencia serán transformados en Divinidad. Si Dios está presente delante de ustedes en la forma de los cinco elementos, ¿qué necesidad hay de buscarlo en otra parte? ¡No hay lugar en absoluto para tal sentimiento! Es un serio error pensar que Dios está separado de los panchabhutas. Consideren a Dios como su todo y su único refugio, dediquen sus sentidos a Él. Éste es un método fácil de alcanzar a Dios. Si siguen este camino fácil, alcanzarán la liberación (moksha). Después de todo, ¿qué es la liberación? El salir del engaño (Moha Kshaya) es liberación. De nada sirve cantar “Rama Rama Rama…” si su mente está llena de engaño (moha). Cualquier trabajo que emprendan, háganlo para complacer a Dios (Bhagavad prityartam). Cualquier persona que encuentren, considérenla como Encarnación de Dios. Hasta el mendigo parado en su puerta es una Encarnación de Dios. Él puede ser un mendigo desde el punto de visto del cuerpo físico, pero es en realidad una encarnación de la Divinidad en el sentido átmico. Sea uno rey, emperador o mendigo, la misma Divinidad satura a cada individuo. ¡Que dediquen sus vidas a ganarse el amor de Dios y Su gracia! Emprendan cada actividad como una ofrenda a Dios. Hasta la lectura de sus libros de textos puede hacerse con tal sentido de dedicación a Dios. Seguramente pasarán sus exámenes con las mejores calificaciones. Estoy feliz de que todos ustedes sean buenos muchachos. Sin embargo, una advertencia, deben exhibir el mismo buen comportamiento que mostraron en la Escuela Primaria en su Escuela Secundaria Superior.

Déjenme recordarles que los maestros de la Escuela Secundaria Superior no vacilarán en castigarlos, de ser necesario, si hacen algo malo. Ellos no tienen nada en contra de nadie, pero es su deber ponerlos en el camino recto. Si un maestro descuida su responsabilidad y permite su mal comportamiento sin darles un castigo, entonces es un ‘guddi guru’ (un maestro ciego). No puede ser llamado guru en el sentido real. El papel de un director de escuela es también importante. De hecho, él es la ‘cabeza’ de todos los maestros. Por ende, él debe supervisar el trabajo de todos los maestros.

La educación no significa simplemente leer libros. Uno no puede volverse grande adquiriendo un grado académico. De hecho, los grados no son grandes. Lo Divino es grande. Por lo tanto, desarrollen tal naturaleza divina. Sólo entonces se santificará su vida y su educación se volverá significativa. Sus padres también serán felices. Quizás sean conscientes de que sus padres los han hecho admitir en la Institución Educativa Sri Sathya Sai con grandes esperanzas. No deben decepcionarlos. Deben ganarse el elogio de su padre, su madre, su maestro y Dios: de los cuatro. Hagan su vida significativa y sagrada mediante pensamientos, sentimientos, práctica y comportamiento buenos.


Traduccion Arlette Meyer

Revision Mercedes Wesley