.



 

Discursos dados por Sai Baba

07. 30/03/04 Manifestación de los Vedas en forma humana

MANIFESTACIÓN DE LOS VEDAS EN FORMA HUMANA

MANIFESTACIÓN DE LOS VEDAS EN FORMA HUMANA

30 de Marzo de 2004

Sai Kulwant Hall – Prasanthi Nilayam

Día de Rama

***************************************************

Más dulce que el azúcar, más sabroso y, en verdad, más dulce que la miel es el

Nombre de Rama. La constante repetición de este dulce nombre

nos da el sabor del divino néctar mismo.

Por lo tanto, contemplen incesantemente en el Nombre de Rama.

(Poema en telugú)

Los Vedas son la quintaesencia de una profunda, inconmensurable e infinita sabiduría. En el Treta Yuga, la Edad de Plata, los cuatro Vedas asumieron forma física y encarnaron como Rama, Lakshmana, Bharata y Shatrughna. Mientras el Rig Veda asumió la forma de Rama, el Yajur Veda, el Sama Veda y el Atharvana Veda se manifestaron en las formas de Lakshmana, Bharata y Shatrughna, respectivamente.

El Poder Divino de los Mantras

Rama simbolizó el Rig Veda. Él era la personificación de los mantras (mantrasvarupa). Lakshmana fue el que contemplaba los mantras (el mantradrasta) y quien ponía las enseñanzas de Rama en práctica. Él seguía a Rama fielmente. Él consideraba que el nombre de Rama era el mantra de la liberación (el taraka mantra). Él, de hecho, consideraba que Rama lo era todo: madre, padre, guru y Dios. Bharata era la personificación del Sama Veda y cantaba el nombre de Rama incesantemente con sentimiento (bhava), melodía (raga) y ritmo (tala). Mientras Bharata se dedicaba a la adoración de Dios Sin Forma (Nirguna Rupa), Lakshmana se regocijaba en la adoración de Dios con Forma (Raguna Rupa). El Atharvana Veda se manifestó en Shatrughna quien seguía a sus tres hermanos mayores y conquistó no sólo el mundo secular sino que logró la victoria sobre el reino de los sentidos también. Los Vedas así encarnaron en el Treta Yuga para impartir un precioso mensaje a la humanidad. Los dos grandes sabios Vasishtha y Vishvamitra declararon al mundo que los cuatro Vedas habían tomado nacimiento en forma humana como Rama, Lakshmana, Bharata y Shatrughna. A consecuencia del gran mérito ganado por Dasharatha, los cuatro Vedas encarnaron como sus hijos. Si alguien le preguntaba a Vishvamitra cualquier cosa acerca de los Vedas, él respondía; “Los cuatro Vedas todos han encarnado como los cuatro hijos de Dasharatha para ponerle un ideal al mundo”. Por ende, los Vedas no carecen de forma; tienen forma.

Los mantras contenidos en los Vedas son de inmensa significación. Cuando el sabio Vishvamitra se dio cuenta de que los Rakshasas o demonios querían detener el canto de los mantras védicos y destruir la rectitud y la verdad sobre la tierra, él buscó la ayuda de Rama y Lakshmana quienes simbolizaban las fuerzas divinas que habían descendido a la tierra para destruir las fuerzas demoníacas y restablecer la paz en el mundo. Con el poder de los mantras que Vishvamitra les enseñó, Rama y Lakshmana aniquilaron los Rakshasas. Este incidente significa que el hombre, con el poder de los mantras védicos, puede destruir sus cualidades demoníacas. Al dedicarse al canto de los mantras, la gente del Treta Yuga eliminó sus cualidades demoníacas. Al simbolizar los poderes divinos de los Vedas, Rama, Lakshmana, Bharata y Shatrughna destruyeron las fuerzas demoníacas y promovieron las fuerzas divinas en el mundo. Los cuatro hermanos así establecieron la supremacía de los Vedas como manifestación del aspecto de Dios con forma. Cada mantra tiene una forma. También tiene su propio significado interno. Cuando se realiza el canto con la contemplación de la forma, lo lleva uno al camino de la autorrealización. Los visionarios védicos declararon: “He visto al Divino Ser que brilla con el resplandor de un billón de soles más allá del reino de la oscuridad” (Vedahametam Purusham Mahantam Aditya Varnam Tamasah Parastat). Los visionarios y sabios trascendieron la oscuridad de la ignorancia y visualizaron la refulgencia de lo Divino. Cantaban los mantras, contemplaban la forma de lo Divino, llevaban a cabo sacrificios (yajñas) y alcanzaron la paz y la bienaventuranza. Hicieron uso de los mantras (palabras de poder), tantras (fórmulas mágicas) y yantras (instrumentos) en la realización de los sacrificios los cuales aseguraron la paz y la prosperidad de la gente en el Treta Yuga. Con la ayuda de los mantras, dominaron a los rakshasas y establecieron el reino de los dioses.

El Namasmara (repetición del Nombre) para la Liberación del hombre

Pero la gente del Kali Yuga, la Edad de Hierro, la actual, han olvidado estos mantras con el resultado de que el Kali Yuga se ha vuelto verdaderamente un Kalaha Yuga, una Edad de discordia y conflicto. Hasta los hermanos pelean entre sí. Viven y comen junto en la misma familia, pero hay odio y conflicto entre ellos. Se han prescrito diferentes medios para la liberación del hombre para cada uno de los cuatro Yugas. Mientras la meditación es la prescrita como el medio primordial de liberación en el Krita Yuga, la realización de yajñas y el canto de mantras son los medios de liberación en el Treta Yuga. Similarmente, la adoración de Dios (archana) es el medio principal en el Dvapara Yuga. Pero es la repetición del nombre o namasmarana que es el principal medio para la liberación del hombre en el Kali Yuga. Como la gente del Kali Yuga no tiene la fuerza ni la capacidad de llevar a cabo rigurosas prácticas espirituales, se les ha aconsejado que hicieran namasmarana.

Harernama Harernama Haranamiut Kevilam;

Kalau Nastyeut Nastyeut Nastyeut Gatiranyatha.

En el Kali Yuga, no hay otro medio más efectivo que

el cantar el Divino Nombre para la liberación del hombre.

El Ramayana no es una historia ordinaria. Contiene el mensaje directo de los Vedas. Rama simboliza la sabiduría de los Vedas. Rama se casó con Sita quien representa el conocimiento de Brahmán (Brahma Jñana). Cuando Sita fue raptada por las fuerzas demoníacas, Rama y Lakshmana la buscaron desesperadamente. El Ramayana contiene miles de shlokas (versos). Como no era posible recordar todos los shlokas del Ramayana, los sabios recomendaban el cantar el Nombre de Rama. Cuando los discípulos de Vasishtha le preguntaron cuál Nombre Divino debían cantar, el sabio dijo, “Es suficiente si cantan el nombre de ‘Rama’. El nombre de Rama los liberará del apego (raga) y de la enfermedad (roga).” Como Swami les dice a menudo a los estudiantes, el nombre de Rama tiene dos sílabas, ‘Ra’ y ‘ma’. Estas dos poderosas sílabas se derivan de los nombres de Vishnu y de Shiva. La sílaba ‘Ra’ viene del mantra de ocho sílabas (ashtakshati mantra) ‘Om Namo Nârâyanâya’. Es el aliento vital del Ashtakshari Mantra. Similarmente, ‘ma’ es el alma misma del mantra de cinco sílabas (panchakshari mantra) ‘Om Namah Shivâya’. De modo que el mantra de ocho sílabas ‘Om Namo Nârâyanâya’ y el de cinco sílabas ‘Om Namah Shivâya’ pierden el sentido cuando las sílabas ‘ra’ y ‘ma’ son removidas respectivamente de sus palabras. Sin ‘ra’ el mantra de ocho sílabas se vuelve ‘Om Namo Nayanaya’ que carece de sentido. De igual forma, el mantra de cinco sílabas sin ‘ma’ se vuelve ‘Om Nah Shivâya’, lo cual no es auspicioso. El nombre Rama es el aliento vital tanto de los vaishnativas como de los shivaitas, es decir, de los adoradores tanto de Vishnu como de Shiva.

En el Treta Yuga, cuando los sabios y los videntes se dedicaban al canto del Divino Nombre de Rama, Ravana, Kumbhakarna y otros demonios trataron de ponerles obstáculos. Pensaron que si raptaban a Sita, que simbolizaba el Conocimiento de Brahman, Rama perdería Su poder. El Nombre perdería su potencia sin el conocimiento, lo mismo que la caña de azúcar pierde su dulzura sin el jugo. Hanuman resolvió traerle de nuevo a Rama esta esencia y se regocijaba bebiendo la ambrosía del Nombre de Rama (ramarasa). La gente del Treta Yuga y del Dvapara Yuga consideraban el nombre de Rama como la esencia de toda dulzura y disfrutaban de su sabor nectarino. En lugar de saborear la deliciosa dulzura espiritual del Nombre de Rama, la gente de hoy devora dulces mundanos, y se exponen al riesgo de volverse pacientes diabéticos. Los dulces mundanos causan enfermedades mientras que el delicioso dulce del Nombre de Rama lo libra a uno de toda enfermedad. En la antigua India, hasta los pastores de los diferentes ganados cantaban el Divino Nombre mientras cuidaban sus vacas y ovejas. No había muchas enfermedades en los tiempos antiguos. Rama, Lakshmana, Bharata y Shatrughna propagaron el glorioso poder de los mantras védicos para liberar al mundo de la enfermedad y del sufrimiento.

Nunca Descuiden la Enseñanza de los Vedas

Mandodari, la reina de Ravana, se esforzó mucho para salvar a su esposo Ravana. Ella le dio sabios consejos a él, pero Ravana no les puso atención. Cuando el esposo va por malos caminos, una esposa virtuosa actúa como su sabio ministro para ponerlo en el camino correcto. Mandodari era una esposa tal. Una esposa (bharya) no es la que provee placeres mundanos a su esposo; ella es la que le hace el bien, guiándolo por el sendero de la sabiduría y rectitud. Mandodari era una verdadera esposa (sati) que trató de enmendar los pasos de su esposo (pati). Sita también le dio sabio consejo a Rama y Le aconsejó que no destruyera a todos los demonios. Ella sugirió que sólo aquellos que habían cometido las malas acciones debían ser castigados. La justicia no está en destruir todo el clan. Las mujeres son grandes porque ellas muestran el camino correcto al hombre. Son, de hecho, la luz de la sabiduría en el mundo. Ellas, por lo tanto, merecen protección y reverencia. Sita simboliza el principio de la sabiduría o jñana tattva. Sita le dijo a Rama que la bondad era universal, sin importar casta, creencia y comunidad. Es debido a mujeres como Sita que los hombres han progresado en la vida.

Hay numerosas especies en este mundo. Cada una de ellas tiene un propósito definido que cumplir en la creación de Dios. Algunas de ellas pueden parecer más hermosas que otras. Uno no puede decir que una vaca es más hermosa que un toro. Pero las virtudes son más importantes que la belleza física. Observando lo bueno y lo malo en el mundo, los estudiantes deben desarrollar el discernimiento necesario para escoger lo primero. Deben esforzarse mucho por cultivar las virtudes. Desde temprana edad, deben absorber buenas cualidades y desarrollar un buen carácter. Dondequiera que vayan, el carácter es de la mayor importancia. Si los estudiantes desarrollan buen carácter, el país entero se volverá bueno y grande. Son las virtudes que le dan grandeza a cualquier persona. Rama brilla en el Ramayana debido a Sus maravillosas virtudes. Las virtudes son más importantes que el conocimiento libresco.

A pesar de su educación e inteligencia, el hombre no abandona su

maldad y sus malas cualidades. Él no tiene conocimiento del Ser.

La educación moderna lleva a argumentación, no a la sabiduría total.

(Poema en telugú)

¡Estudiantes, Muchachos y Muchachas!

Deben esforzarse por alcanzar la sabiduría total. Deben hacer el uso correcto de los ojos, de los oídos y de la lengua que Dios les ha dado. El que logra controlar estos tres logra grandeza. Por lo tanto, deben cultivar la visión correcta, la audición correcta y el habla correcta. Hablen siempre dulce y suavemente. El que cultiva estas tres virtudes de verdad se volverá divino. Este es el objetivo primordial y la base fundamental de toda su educación. Aquellos que carecen de estas virtudes son virtualmente demonios. Esta es la esencia y el mensaje del Ramayana. Los cuatro Vedas y las otras escrituras exhortan al hombre a seguir estos principios. ¡Amados Estudiantes! Nunca descuiden las enseñanzas de los Vedas. Son para la emancipación y la redención de la humanidad. Pónganlas en práctica en sus vidas.

(Bhagavan concluyó Su Divino Discurso con el bhajan “Rama Rama Ram Sita...”)


Traduccion Arlette Meyer

Revision Verónica y Carlos Fazzari