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Discursos dados por Sai Baba

25. 15/09/63 Huérfanos pero protegidos

15 de Setiembre de 1963

Ciudad de Mysore, Vanivilasapuram

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El Kannada es un idioma dulce y suave, pero no me propongo hablar ahora en él, pues creo que pueden seguir lo que yo diga aunque hable en télugu.

Me complace colocar la primera piedra de este Hogar para Niños Retrasados y el albergue y talleres del Mahila Makkala Kuta, pues el servicio es la mejor forma de adoración. Sé que ésta es una institución que rinde un servicio real, que es un faro en el mar de lo mundano.

Para todas las formas más elevadas de servicio, la devoción es el aliento mismo. De los dos, de las ganancias mundanas y del mérito espiritual, Sunandamma ha escogido el mérito espiritual; por eso, cuando se le ridiculiza, ella sigue adelante, y cuando se le alaba, ella no acepta la alabanza. Para tener éxito en esta empresa ella debe fortalecer su fe en el Señor. Es suficiente.

Cuando empieza el periodo de las elecciones, la gente de repente va de aquí para allá cayendo a los pies de todos y pidiendo votos. Deberían haber caído a los pies del Señor y él les habría derramado su gracia. Si es una persona devota, llena de humildad y de espíritu de servicio, habría obtenido los votos necesarios aun sin esa humillación de ir pidiéndolos de puerta en puerta.

Sean buenos, sean serviciales, sean útiles, sean temerosos de Dios; entonces la confianza del pueblo será suya. Estoy seguro que el ministro Kanthi, que se encuentra presente, estará de acuerdo conmigo cuando digo que un hombre así no tiene ninguna necesidad de ir mendigando votos; la gente, de hecho, saldrá adelante y ofrecerá votos a sus pies. Fe, fe: ése es el verdadero aliento de la victoria; fe en su éxito, a pesar de las señales de fracaso.

El apego y el odio: éstos son los grandes enemigos del progreso, en cualquier esquema de servicio social, y aun en cualquier esquema de trabajo. Si el individuo está engañado en creer que él está salvando a los demás, entonces ¡pobre de él!, pues no hay ningún otro. Todos son Uno. El dolor del uno es el dolor de todos. La falla fundamental es la ignorancia del hombre. Si fuera sabio, él sabría que todos los individuos son como las olas en la superficie del mismo océano.

La acción desinteresada es el ideal que deben tener; ahora, todo está medido por el resultado, la ganancia que se acumula. El estudio también es para el salario que puedan obtener basado en la graduación que es su meta. Si usted está abanicando a una persona por amor, ella no puede culparle cuando usted se va; pero si el sirviente pagado encargado del abanico se detiene, el amo puede reprenderle. En el primer caso, el acto está hecho en la sin apego por el fruto; allí no hay intento de buscar provecho. El deseo por el provecho es como los colmillos venenosos; cuando se sacan, la serpiente del karma se vuelve inofensiva.

La disciplina correcta para adquirir la actitud de desapego por el fruto es la dedicación; y la dedicación es posible sólo cuando se tiene intensa fe en Dios. Esa fe se vuelve firme a través de la práctica espiritual. Actualmente, la práctica espiritual es como los tentempiés que uno toma; pero los platos principales son todos del mundo, vienen del mundo. Lo espiritual debe ser la porción más grande del alimento.

Deben estar pendientes del peligro de una caída, a tiempo. No se comporten como el dueño de una casa que cuando su esposa le dijo: "Oigo un ruido", respondió: "Lo sé, no interrumpas mi sueño". A los pocos minutos ella dijo: "Alguien ha entrado a la casa", pero él contestó nuevamente: "Lo sé". Luego, ella exclamó: "Está abriendo la caja", e invariablemente, el hombre musitó: "Lo sé", y se quedó callado. Después de algún tiempo, ella volvió a hablar: "Está corriendo"; pero su dormilón marido contestó siempre "lo sé", no puso ninguna atención a las advertencias del robo. Así también ustedes no hacen caso a la advertencia, sino que caminan hacia el desastre con los ojos abiertos.

Una vez que sientan que todos son olas del océano, ya no usarán la palabra anatha, sin protector, que encontré en el informe que fue leído. En cierto sentido, no hay nadie sin protector; todos tienen protector, pues el Señor cuida de todos. Él es el Señor de todos: Pashupati, en que Pashu significa a los individuos. Hay un solo Purusha o principio masculino en la creación; todos los demás son stri o femeninos. Y tampoco hay ningún bufón ; es sólo un papel jugado por aquella manifestación particular de la forma del conocimiento que es el Ser Supremo. Puede que el actor Nagaiah haga el papel de Thyagayya en la película sobre Thyagaraja, pero durante todo ese tiempo, su nagaiah es la verdad, la realidad. El rol de Thyagayya es un papel temporal en el drama de la vida.

Recuerden ustedes esto y no se demoren en su viaje hacia Dios. Ustedes llenan el tanque de gasolina para el viaje que tienen que hacer, ¿no es así? Cuando se proponen mantener el carro en la cochera durante mucho tiempo, no llenan el tanque. Pues bien, el cuerpo también es alimentado con combustible para que pueda ir de viaje, el viaje hacia Dios. Ese viaje es a través del karma, del buen karma, del karma sin apego por los frutos. Ese karma se llama "corpóreo" (kayaka): el esfuerzo del cuerpo (kaya) para la liberación del alma aprisionada dentro de él.

No todas las gotas que caen del cielo logran llegar al mar. Sólo aquellas que fluyen en un río son las que alcanzan la meta de todas las gotas que, como vienen del mar, anhelan regresar a su fuente.

Veo que el sol ha invadido este lado del toldo; este toldo no es suficientemente grande para proporcionarles sombra a todos ustedes. No puedo soportas verlos sufrir. Veo ahí a un hombre que se ha desmayado. Llévenle este vibhuthi, que lo beba con un vaso de agua. (Y moviendo su mano derecha creó una cantidad de vibhuthi como muestra de su gracia).

Cuando me este yendo, no corran y caigan a mis pies. Hagan el saludo a los pies en sus corazones; es mejor que aplastar a todo el mundo y forzar su paso hacia adelante. Hay muchos hombres de edad, personas enfermas y niños; de manera que manténganse tranquilos y pacientes. ¿Por qué hacer una cosa que no les da plena satisfacción y que a mí tampoco me da satisfacción? Hagan de Sai el residente de su corazón; esto les dará a ustedes una causa y a mi, alegría.