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Discursos dados por Sai Baba

22. 24/05/93 Desde la mente hasta la Mente Suprema

Desde la mente hasta la Mente Suprema

Desde la mente hasta la Mente Suprema

24 de Mayo de 1993

Curso de Verano en Brindavan

¿Puede la vida ser redimida meramente realizando Japa?

Sólo cuando la mente es dominada, el hombre puede volverse sublime.

La mente proclama su sorprendente singularidad al mundo mediante su capacidad de expresar sentimientos, reconocer formas, apreciar la belleza de los colores, disfrutar de diferentes olores así como también por su poder de pensamiento. Como el mundo está impregnado de estas cualidades de la mente, estas cinco cualidades lo penetran todo. La mente es sumamente poderosa. Una vez que los poderes de la mente son comprendidos, la naturaleza del mundo entero puede ser comprendida. Cuando ustedes prueban una sola gota de agua de mar, conocen el sabor de toda el agua del océano. La gota y el océano son lo mismo. Del mismo modo, la mente es el mundo y el mundo es la mente.

Hoy, en este vasto mundo, hay más de 5.000 millones de personas. Puede haber diferencias entre ellas en cuanto a nombre y forma y en sus hábitos de alimentación y recreación. Sin embargo, cuando se los considera desde el punto de vista físico, todos los seres humanos son uno. En cada cuerpo humano, hay cuatro formas, que pueden ser comprendidas mediante una correcta Tatva (indagación). En esta indagación sobre la verdad, Tat se refiere a Paramatma (el Ser Supremo). El Ser Supremo es infinito e inconmensurable.

Para comprender al infinito Paramatma tienen que seguir una de las innumerables sendas. El Vedanta puso énfasis en nueve de estas sendas: Shravanam (escuchar), Kirtanam (cantar las glorias de Dios), Vishnuh nama smaranam (recordar los nombres del Señor), Vandanam (ofrecer salutaciones), Archanam (adoración ritual), Pada sevanam (Servicio a los Pies de Loto del Señor), Dhasyam (servicio), Sakhyam (amistad) y Atma-Nivedanam (entrega total). Estas nueve sendas de devoción han sido prescriptas para permitir al hombre experimentar su variada originalidad.

Los componentes de los cuerpos físico y sutil

Para comenzar, está el cuerpo físico. Es visible para el ojo. El cuerpo está formado por veinticinco componentes: cinco Karmendriyas (órganos de la acción), cinco Jñanendriyas (órganos sensoriales), pancha-pranas (cinco aires vitales), pancha Tanmatras (cinco facultades sensoriales). Además, hay cuatro instrumentos internos: la mente, la voluntad, el ego y el Antahkarana (el Motivador Interno). Todos éstos suman veinticuatro. Cuando éstos se asocian con la Fuerza Vital, uno tiene en total 25 componentes. Estos veinticinco componentes han emanado del cosmos; el ser encarnado es llamado Vishva. El cuerpo físico es cósmico en su forma. No es algo individualista. La condición humana es una manifestación de lo colectivo.

El segundo cuerpo es Sukshma deham (el cuerpo sutil). El mismo está formado por diecisiete componentes: las cinco facultades sensoriales, los cinco sentidos y los cinco aires vitales. Junto con la mente y el intelecto, ellos constituyen los diecisiete componentes. Todos estos componentes tienen la cualidad de Tejas (luminiscencia); el cuerpo sutil es llamado Taijasa. Los resultados de las buenas y las malas acciones del hombre son experimentados por este cuerpo sutil. Todo lo agradable y lo desagradable en el mundo es experimentado por el cuerpo sutil. Este cuerpo es también Yatana (experiencial) porque está expuesto a diversas experiencias.

Estados de conciencia y de olvido

El tercero es el Karana sharira (cuerpo causal). Está formado sólo por dos componentes: Chitta (fuerza de voluntad) y Prajña (Conciencia Integrada Constante). Debido a su asociación con Prajña, este cuerpo es llamado Prajñanam o Prajña.

El cuarto es Mahakarana (la Mente Suprema). Ella es auto-luminosa y refulgente en su forma original. Recibe el nombre de “Uniki” (un Ser con conocimiento de sí mismo). Debido a su capacidad de auto-conocimiento, también recibe el nombre de “Eruka” (Conciencia). En contraposición a la Conciencia está su opuesto, el olvido. Los cuerpos físico, sutil y causal pertenecen a este último (el olvido). Los tres estados de Jagrat (vigilia), Svapna (sueño) y Sushupti (sueño profundo) también pertenecen a los estados de olvido (de no-conciencia del verdadero Ser).

Por lo tanto, la verdadera forma es la Conciencia. La Conciencia es la base sutil. El Olvido es denso. Sin embargo, tanto en la Conciencia sutil como en el Olvido denso la Divinidad está presente por igual. Esto es descrito en metafísica de un modo diferente. El Jivatma está presente siempre, en los tres estados de Conciencia y en la Conciencia así como también en el Olvido, como el Ser Interno.

La materia y la energía están relacionadas entre sí

En cada padharta (objeto) del mundo, Pararta (lo trascendental) es inmanente. Padharta es perceptible. Pararta está presente en él como energía. Aunque padharta (la materia) y Pararta (la Energía) parecen dos entidades diferentes, su unidad constituye el Principio Divino inmanente en el cosmos. La energía es la base sutil, la materia es su expresión densa. Están relacionadas entre sí de forma inextricable. El Gita ha descrito esta relación como la que existe entre Kshetra (el Campo) y Kshetrajña (el Conocedor del Campo). Toda la Naturaleza es Kshetra. El Kshetrajña es el Uno que satura toda la Naturaleza y la anima. Sin el Kshetrajña (el Conocedor), el Kshetra no puede existir. Sin el Kshetra, el Kshetrajña no puede ser percibido. En el Bhagavad Gita, Krishna declara: “Conóceme también como el Conocedor en el kshetra”.

En este contexto, debe comprenderse que es a través del poder de la mente que la creación, el sostenimiento y la disolución tienen lugar en el cosmos. Esta verdad es expresada en el Brahma Sutra como: “Tat Jalan”. “Todo nace, es sostenido y se funde en Tat.” Tat (Aquello) también recibe el nombre de Akshara Purusha (la Persona Suprema indestructible).

Kshara y Akshara contienen el secreto de la vida

Akshara en el lenguaje común significa aquello que es indestructible. Kshara significa aquello que está expuesto al cambio. El secreto de la vida se halla contenido en los términos Kshara y Akshara. El cuerpo está sujeto al deterioro. El Atma (Ser) es indestructible. La palabra Akshara contiene tanto lo indestructible como lo perecedero. “A” se refiere al Atma, que es indestructible. Kshara es el cuerpo perecedero. Akshara representa la forma unificada del cuerpo perecedero y el Ser imperecedero. “A” también significa aquello que es Anantam (Infinito) y Amritam (inmortal). Kshara es aquello que es transitorio e irreal.

De Akshara emerge la Divinidad refulgente, que es una combinación de Paramatma (el Ser Supremo) y Prakriti (la Naturaleza). La Divinidad es inmanente en la Naturaleza. El Uno está presente en ambos. Esto fue lo que Prahlada proclamó cuando le dijo a su padre, Hiranyakasipu: “No tengas ninguna duda de que Él (Dios) está aquí y también allá”. Prakriti no es inerte. Es mediante la unión de la Naturaleza y la Divinidad que la condición humana adquiere su refulgencia.

He aquí una caja de fósforos en mi mano. Ella no se quema en mi mano. Yo la conservo en esta toalla. La toalla no se quema. Sabemos que hay fósforos dentro de la caja. Cuando uno enciende el fósforo, una llama estalla. Esta llama causará una quemadura si la sostenemos en la mano. Puede prender fuego a una toalla. ¿Dónde reside el fuego? ¿En el fósforo o en el revestimiento en el exterior de la caja de fósforos? Está en ambos. Sin embargo, sólo cuando uno junta el fósforo y el revestimiento exterior la llama emerge. Del mismo modo, hay divinidad en la mente y en el corazón. Sin embargo, sólo cuando la mente y el corazón se unen la refulgencia de la Divinidad brilla.

Cuando el fósforo es sumergido en agua, no pueden producir fuego frotándolo contra la caja, porque el elemento que produce el fuego pierde su poder. Del mismo modo, cuando la mente está inmersa en las aguas de los placeres sensuales, pierde su poder de irradiar la refulgencia Divina. ¿Cuándo recobrará este poder? Cuando se libere de su humedad atravesando el proceso de Vairagya (desapego). Sólo cuando este desapego crezca en el hombre, él experimentará la bienaventuranza de la unidad con Dios.

Sean conscientes de su verdadera esencia

Mientras el hombre esté inmerso en búsquedas sensuales, él no podrá experimentar la refulgencia de su verdadera naturaleza. Cuando el hombre cultiva el desapego, tomando conciencia de la transitoriedad de los placeres sensuales, entonces él comienza a ser consciente de su verdadera esencia. Todas las formas de adoración ritualista son inútiles porque están basadas en la dualidad. El hombre tiene que superar este estado y realizar su unidad con Dios.

El hombre está buscando continuamente tener una visión de Dios. Sin embargo, él no logra tomar conciencia de que la Divinidad está presente en todas partes en el cosmos. No lograr ver lo Divino en el universo visible es una señal de ignorancia. Todo en el universo fenoménico está saturado por Dios. Cuando ustedes ven la Naturaleza, sólo ven su aspecto mundano. Cuando sus mentes están centradas en Dios, ustedes ven lo Divino en todo. Por ende, el error reside en su drishti (visión) y no en srishti (la creación). Transformen su perspectiva.

Por lo tanto, desde el comienzo, tienen que ver a todo como una manifestación de Dios. La dificultad en reconocer la verdad acerca de lo Divino fue expresada por el santo Surdas cuando dijo: “¡Oh, Krishna! ¿Cómo puedo reconocerte? Tú eres más sutil que el átomo y más vasto que lo más vasto. Tú estás presente en las 8.400.000 especies en el universo, saturándolo todo en el cosmos, desde una hoja de pasto hasta el objeto más vasto de la creación. ¿Cómo puedo reconocer tu forma infinita?” Los grandes experimentaron a Dios en esta forma infinita, reconociendo que la Divinidad está presente incluso en los malvados y los malintencionados.

Las olas son esencialmente lo mismo que el océano

El infinito número de seres humanos en el mundo son como las olas del océano. Las olas pueden diferir en forma. Sin embargo, no importa lo innumerables que ellas sean, cada una es esencialmente lo mismo que el océano. Desde el océano de Sat-Chit-Ananda (Ser-Conciencia-Bienaventuranza), surgen innumerables olas de seres humanos. Cada uno de ellos tiene los atributos de Sat-Chit-Ananda, la Divinidad. Ustedes pueden ser una gota en el océano de Sat-Chit-Ananda, pero la diferencia sólo reside en la cantidad (el tamaño) y no en la calidad. La divinidad presente en el hombre y la divinidad en Dios son una y la misma, así como los focos pueden variar pero la corriente que los hace brillar es la misma. Las diferencias en la luminosidad se relacionan con el vatiaje de los focos y no con la corriente que fluye por ellos. Esto se aplica por igual a las diferencias entre los seres humanos. Cuando una persona está llena de sentimientos estrechos, ella parece inferior a una de mente amplia y buen corazón. Un hombre puede considerarse ignorante, tonto o estúpido. Sin embargo, esto es un completo error. De hecho, él no es ni ignorante ni tonto. Él es inteligente, bien intencionado y sabio. Todo lo que necesita es un cambio de actitud para experimentar estas capacidades inherentes. Tienen que hacer que la refulgencia divina en sus corazones brille.

Amplíen su mente y su visión

La gente a menudo le recomienda a uno que agrande su corazón. ¡Pero el agrandamiento del corazón los obligará a ir a un cardiólogo! Lo que tienen que hacer es ampliar su mente, su visión. El corazón, es decir, no el corazón físico sino el espiritual, es inherentemente amplio. Posee conciencia cósmica. No hay necesidad de ampliarlo. Sólo se necesita una mente amplia para reconocer la vastedad del corazón espiritual. La estrechez mental debe desaparecer. Debe renunciarse totalmente a las ideas estrechas del “yo” y “lo mío” en todas sus formas.

Por el contrario, comenzando desde el “yo”, deben continuar expandiendo su conciencia para abrazar a su familia, su aldea, su nación y al mundo entero. Entonces su divinidad brillará en todo su esplendor. Esto es descrito como tener la visión del propio Ser verdadero y universal. Recibe el nombre de Maha-purushatva (la Divinidad Infinita). Ustedes son Divinos incluso ahora. Sin embargo, ésta es solo una fase temporaria como resultado de su devoción. A lo que deben apuntar es a la Divinidad Infinita, que es inmutable. Esta Divinidad está dentro de ustedes. No necesitan adquirirla desde afuera, de nadie más. Es inherente a ustedes. Esfuércense por realizarla. ¿Cuándo podrán realizarla? Cuando se hayan librado de la conciencia de los estados de vigilia, sueño y sueño profundo, entonces podrán reconocer el estado de Mahakarana (el estado de la Conciencia Súper Causal).

Tienen que trascender los cuerpos denso, sutil y causal y realizar el cuerpo Súper Causal. Mediante este proceso ustedes avanzan desde la Súper-mente, a la Mente Superior, a la Mente Iluminada y a la Divinidad, que recibe el nombre de Mente Suprema. Éste es el estado más allá de la mente; es llamado Amanaska (donde la mente está ausente). También ha sido descrito como el estado de Vidheha (donde la conciencia del cuerpo está ausente). La mente está asociada con el cuerpo. El mundo está asociado con la mente. Y el mundo está ligado al placer y el dolor. Todas éstas son fuentes de atadura más que de Bienaventuranza. La Bienaventuranza puede experimentarse sólo a través de la Mente Suprema.

Cuatro clases de ofrendas para alcanzar la Mente Suprema

¿Cómo ha de alcanzar uno la Mente Suprema? El Vedanta prescribe la ofrenda de cuatro cosas como medio: Patram, Pushpam, Phalam, Toyam (una hoja, una flor, un fruto o agua). El Señor no es alcanzado mediante ofrendas de riquezas o la ostentación del propio poder o posición. Debe comprenderse el significado correcto de las cuatro clases de ofrendas mencionadas en las escrituras. Debido al deseo egoísta de obtener a Krishna enteramente para sí misma, Sathyabhama hizo una ofrenda de Krishna al sabio Narada y trató de comprar a Krishna de vuelta ofreciendo todas sus riquezas y joyas para ser contrapesadas con Krishna. Sin embargo, todas éstas no igualaron el peso de Krishna. Entonces trajeron a Rukmini y ella le enseñó una sabia lección a Sathyabhama con respecto al poder de la devoción. Algo, sin importar lo pequeño que sea, tiene que ser ofrecido al Señor para obtener Su gracia. Esto resulta evidente en las experiencias de Draupadi y Kuchela. Ésta es también la razón principal de la práctica bharatiya de llevar algunas flores o frutos como ofrenda al Señor cuando uno visita un templo.

En realidad, el mero nombre del Señor es equivalente a la forma del Señor. Cuando Rukmini invocó el nombre de Krishna, eso fue suficiente para equilibrar los dos platillos de la balanza, en uno de los cuales estaba sentado Krishna. Narada dijo que algo más debía ser ofrecido para inclinar la balanza en la que le estaban haciendo la ofrenda. Entonces Rukmini colocó una hoja de tulsi sobre las joyas y oró así: “Si es verdad que la ofrenda de una hoja, una flor, un fruto o agua por parte de un devoto obtendrá el favor del Señor, Oh Krishna, acepta esta hoja de tulsi”. El platillo en el que fue colocada la hoja de tulsi, pronunciando el nombre de Krishna, descendió inmediatamente.

El cuerpo, el corazón, la mente y las lágrimas de dicha

¿Cuál es el significado interno de la referencia a las cuatro clases de ofrendas? Patram no se refiere a algún tipo de hoja que está expuesta a marchitarse. El cuerpo de ustedes es la hoja que ha de ser ofrecida. Pushpam se refiere a la flor de su corazón. Phalam se refiere al fruto de su mente. Y Toyam significa las lágrimas de dicha que fluyen de los ojos del devoto. Estas cosas han de ser ofrecidas a Dios.

Cuando uno ofrece estas cosas al Señor, entra en el estado de la Mente Suprema. Además, esta devoción no debería ser un ejercicio de dedicación parcial. Debe estar presente todo el tiempo, en la prosperidad o la adversidad, en el placer o el dolor. “Sathatam Yoginah”, declara el Gita. Los yogis están en constante comunión con Dios. Hoy los hombres son yogis en la mañana, bhogis (amantes de la comida) al mediodía y rogis (víctimas de la enfermedad) en la tarde.

El verdadero devoto está inmerso en el Señor todo el tiempo y lleva a cabo todas las acciones como ofrendas al Señor. Cualquier acción que realizan, como maestros o estudiantes o empleados, cuando la realizan en el nombre del Señor, se vuelve una ofrenda piadosa. Éste es el modo más fácil de sublimar la mente. Cuando consideren a su cuerpo como un regalo de Dios, no cometerán ningún acto pecaminoso. Cuando consideren a su riqueza como un regalo de Dios, no la emplearán mal. Harán un uso correcto de ella. Del mismo modo, cuando consideren a todos sus talentos como dones de Dios, los usarán en el servicio a la Divinidad.

El programa cuádruple de límite a los deseos

En la Organización Sathya Sai, se ha establecido un programa cuádruple de límite a los deseos. El mismo insta a todos a no desperdiciar comida, dinero, tiempo y energía. Evitar el desperdicio de estas cuatro formas de regalos de Dios es sadhana espiritual. Es el medio para la realización del Ser.

La espiritualidad consiste en olvidar los asuntos mundanos y sumergirse en Dios. Esto significa santificar cada acción en la vida, sea hablar o caminar o cualquier otra cosa. Leer y escribir también son formas de meditación, porque requieren de concentración. Todo en la vida puede convertirse en una forma de meditación.

Eviten hacer algo de prisa. No es difícil alcanzar el estado de la Mente Suprema si uno tiene la determinación de alcanzarlo. Se están gastando millones de rupias en explorar el espacio. Sin embargo, se realiza muy poco esfuerzo para explorar el corazón dentro del propio ser.

Cuando cada hombre procure actuar según los dictados de su conciencia, él realizará la sublime conciencia dentro de sí. Hay dos elementos básicos en el hombre, la cabeza y el corazón. Cuando ambos son utilizados correctamente, las manos actuarán del modo correcto.

--------------- fin del discurso ---------------------

Bhakti y Jñana son como el par de bueyes para el carro; ambos tienen que tirar al unísono. Cada uno tiene que avanzar al mismo paso que el otro y ayudar a arrastrar el peso más rápidamente. Jñana tiene que ayudar al aumento de Bhakti; Bhakti tiene que contribuir al crecimiento de Jñana.

- BABA


Traduccion Mercedes Wesley