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Discursos dados por Sai Baba

09. 15/03/92 La cabeza y el corazón

La cabeza y el corazón

La cabeza y el corazón

15 de Marzo de 1992

Si los pensamientos de la mente son buenos, el resultado será igualmente beneficioso.

Si los pensamientos de la mente son impuros, las acciones resultantes también lo serán.

“Yad Bhavam Tadbhavati” (“Así como uno siente, eso se vuelve”).

Así como son los pensamientos, son los resultados. Así como es la semilla, es la planta. Así como es la harina, es el pan.

En el cuerpo humano, hay dos órganos importantes. Uno es el corazón, y el otro, la cabeza. Todas las acciones del mundo, todas sus consecuencias, se originan en la cabeza. Los Vedas han declarado que todas las cosas que se originan en la cabeza están relacionadas con Pravritti Marga (la Senda Externa) y aquellas que surgen del corazón se vinculan con Nivritti Marga (la Senda Interna). Todo lo que ustedes piensan, todo lo que hacen, todos sus logros, ganancias y pérdidas están relacionados con la cabeza (con los pensamientos). Todo lo que sale de la cabeza se relaciona con Prakriti (el mundo fenoménico), crece a partir de él y, finalmente, se funde en él. Por lo tanto, todos los pensamientos están asociados con Prakriti (el mundo externo).

Sin embargo, sentimientos tales como paz, bondad, compasión, tolerancia y amor emanan del corazón. Ellos trascienden a Prakriti (los fenómenos externos). En consecuencia, en el corazón debería albergarse lo puro y lo sagrado, y nada que esté manchado.

El corazón humano, que tendría que ser como kshira (la leche) en cuanto a su pureza, hoy, por desgracia, está contaminado y es kshara (salino) como el agua de mar. El Señor reside dondequiera que está la pureza del océano de leche. Por esta razón, los devotos han llamado al Señor Kshirasagara Sayana (Aquel que se reclina en el Océano de Leche).

El Señor mora solo en un corazón puro y Sátvico Kshira, la leche, representa aquello que es Sátvico, puro y sagrado. El corazón debería ser puro y no contaminado, como la leche. El Señor elegirá morar solo en un corazón así de puro y Sátvico.

¡Qué pena! Hoy el corazón del hombre, en lugar de ser un Kshirasagara (océano de leche), es Ksharasagara (salobre). En el Océano de Leche, no crecerán las temibles criaturas acuáticas, como las ballenas y los cocodrilos. Estas criaturas solo pueden sobrevivir y crecer en un océano salobre. ¿Cuáles son las criaturas que se desarrollan en el océano salado? Son las malas cualidades, como la lujuria, el odio, la codicia, la envidia y el orgullo. ¿Qué significa que hoy el hombre esté lleno de estas malas cualidades? Ello demuestra que el corazón del hombre está privado de la leche (de las buenas cualidades). Si hubiera sido puro como la leche, no habría quedado espacio para otras cualidades que no fueran las virtudes sagradas.

Llenen su cabeza de pensamientos sagrados Hoy parece no haber límite para los deseos del hombre. Toda la vida humana está dedicada a satisfacer estos deseos. Cada momento está lleno de anhelos insaciables. La cabeza del hombre está repleta de esos deseos. Si la cabeza solo se llena con pensamientos sagrados, esta será santificada.

¿Cómo debe hacerse este cambio? El alimento es un factor importante. Cuando se ingiere con moderación alimento puro, sagrado y sano, ese alimento transformará la cabeza. Esta se dirigirá hacia Dios. Así, el Alimento, la Cabeza y Dios son los tres elementos cuya unidad divinizará al hombre.

Incluso el alimento Sátvico (el que conduce al desarrollo de buenas cualidades) debería consumirse con moderación. Si la alimentación no es pura, sana ni moderada, el hombre se vuelve Tamásico (propenso al mal). A su debido tiempo, esto lleva al desarrollo de cualidades Rajásicas (la ira y otras).

¿Cuál es, entonces, el alimento adecuado para el hombre?

El ser humano posee cinco órganos de percepción: la boca, los oídos, los ojos, la nariz y la piel. Lo que se considera alimento Sátvico es ingerido por la boca. ¿Pero qué alimento “consumen” los otros sentidos? Los ojos consumen alimento Rajásico (al mirar cosas feas e indeseables). Al mirar hacia aquí y hacia allá como cuervos, los ojos consumen “alimento” impuro de todo tipo.

Así, los ojos no reciben el alimento apropiado. No miren lo malo, miren lo que es bueno.

Ahora bien, ¿qué oyen los oídos? Todo el tiempo oyen escándalos, habladurías, comentarios malos acerca de otros. No escuchan el nombre de Dios o algo que sea sagrado y bueno.

¿Por qué alguien tendría que escuchar esas habladurías? El hombre sólo debería ocuparse de sus propios asuntos. Transformándose a sí mismo, debería compartir sus buenos pensamientos con otros. No está nada bien interesarse por las cosas malas de otros. No oigan lo malo, oigan lo que es bueno.

El papel múltiple de la lengua Ahora llegamos al habla. La lengua es un órgano muy poderoso.

Los ojos solo pueden ver. Los oídos solo pueden oír.

Sin embargo, la lengua tiene una doble función: el habla y el gusto. Por lo tanto, debe mantenerse la lengua bajo un riguroso control. Solo entonces el alimento consumido por la boca será puro y sagrado.

La lengua tiende a permitirse varias actividades indeseables:

hablar mal de otros, hablar demasiado, dedicarse a los chismes, y demás. De las cuatro clases de mala conducta de la lengua, la primera es hablar demasiado con otros. Hablar sin cesar con todo tipo de personas es algo malo. La segunda tendencia mala es injuriar a otros. La tercera es burlarse de otros.

La cuarta es complacerse en la falsedad. Al usar mal la lengua de estas cuatro formas, la vida del hombre se vuelve impía.

Reconociendo la grandeza de la lengua, el santo Jayadeva declaró: “¡Oh, lengua! Tú sabes qué es dulce y te agrada lo que deleita el corazón. Debes pronunciar lo que es verdadero y beneficioso.

Por eso, regocíjate pronunciado los nombres del Señor y ninguna otra cosa”. La lengua es la causa de la grandeza de un hombre o de su ruina. Debe haber armonía entre palabra y acción. Si sus acciones no se corresponden con sus palabras, sus vidas se arruinarán. Por lo tanto, la lengua debe ser “alimentada” apropiadamente, con buenos pensamientos, buenas palabras y buenas acciones, para que pueda comportarse de la forma correcta.

La importancia del sentido del tacto También existe sparsa (el sentido del tacto). Eviten tocar a otros. El significado de esta regla no se percibe en la superficie.

Sin embargo, es sumamente importante en un sentido más profundo.

Los antiguos sabios solían buscar lugares aislados y dedicarse a la meditación por la siguiente razón: hay una energía divina dentro del cuerpo, una especie de corriente que fluye en él. Esta energía está presente en todos.

Cuando se electrifica una casa, se instala también un cable a tierra para proteger a las personas de las descargas eléctricas.

Cuando una persona está meditando, se genera en ella una energía divina. La Tierra también tiene una energía (energía gravitacional) que atrae a los objetos hacia ella. Esa es la razón por la cual, cuando una persona se sienta a meditar, apoya una tabla de madera en el suelo, extiende una piel de ciervo sobre ella y, encima, una tela. La tela sirve como una almohadilla que protege a la persona de algún pinchazo de la piel de ciervo. Esta clase de meditación se llama Sukhadhyana (meditación con comodidad). La tabla de madera actúa como aislante, evitando que la energía pase hacia abajo.

Hay que reconocer la presencia de una energía divina en el cuerpo humano. Cuando esta energía divina entra en contacto con el cuerpo de otra persona, es probable que reciba los malos pensamientos de esta última. Si el otro es una buena persona, ustedes pueden recibir buenos pensamientos a raíz del contacto. Sin embargo, no pueden decidir quién es bueno y quién es malo. Por lo tanto, si se sientan aparte durante la meditación, es posible que experimenten pensamientos sumamente elevadores. Algunas personas dicen: “¡Swami! Yo no abrigo ningún pensamiento malo en mi mente, pero de algún modo los malos pensamientos se infiltran en ella. ¿Cómo ocurre eso?”.

La razón es esta: los malos pensamientos de otras personas entran en sus mentes. Al vincularse estrechamente con malas personas, las ideas malas entran en la cabeza.

El significado de Pada namaskar El motivo por el cual se inclina la cabeza a los pies de Bhagavan es que, al hacerlo, los pensamientos sagrados entran en la mente del devoto. Esto significa que, cuando uno entra en contacto con los pies de Bhagavan, los sagrados impulsos fluyen desde ellos hacia el devoto. Cuando la cabeza del devoto toca los pies del Señor, la energía divina del Señor fluye hacia él. Esto implica que deben estar en contacto únicamente con objetos puros y mantenerse alejados de los objetos impuros.

Todo lo que tocan los afecta. Por ejemplo, si tocan el fuego, se queman. El fuego puede quemar incluso el hierro. Es así de potente. Sin embargo, cuando el fuego se extingue, el residuo es mero carbón. Cuando ustedes tocan el carbón, la mano se ennegrece. Así, en cualquiera de los dos casos, el contacto no es beneficioso.

Sin embargo, ¿qué ocurre cuando ustedes entran en contacto con el fuego divino? Todos sus malos pensamientos y malas acciones quedan reducidos a cenizas. Esta es la santidad que acompaña la realización de Pada namaskar (postrarse ante los Pies del Señor). Cuando se asocian con alguien, las cualidades de la otra persona los afectan. Por eso se ha dicho: “Mediante la asociación con los buenos, desarrollen desapego y soledad. Mediante la reclusión, aquieten la mente. Mediante la quietud de la mente, libérense de toda ilusión. Liberarse de las ilusiones es Liberación”. (Bhagavan recitó la estrofa correspondiente del Bhaja Govindam).

Elijan ser amados por el Señor y estar cerca de Él La buena compañía es esencial. Tomen como ejemplo un trozo de carbón. Para encenderlo, hay que acercarlo a un trozo de carbón encendido. Quemará mejor si se sopla sobre ambos.

Este es el resultado de “ser amados y estar cerca” (de la fuente del fuego). Esto también se aplica al devoto. Hay muchos que están “cerca” de Bhagavan, pero son como los sapos en un estanque de lotos. Los sapos están cerca del loto, pero no prueban su miel. Sin embargo, las abejas llegan desde lugares remotos para probar la miel del loto. Si los sapos fueran conscientes de la dulzura de la miel, no dejarían que las abejas se acercaran. Por lo tanto, no es suficiente estar cerca. También tienen que procurar ser amados por el Señor.

Tienen que estar cerca y ser amados. Si aman al Señor, pero están lejos de Él, sufren la angustia de la separación como una madre que se preocupa cuando no tiene noticias de un hijo que está en el exterior. Así, tanto el amor como la cercanía son necesarios. Este es el valor de tener el darshan del Señor.

El Vedanta ha declarado: “Darshanam papa nashanam” (“La visión del Señor destruye todos los pecados”). “Sambashanam Sankata nashanam” (“Conversar con el Señor destruye todo pesar”).

“Sparshanam Karma vimochanam” (“El toque de la Divinidad lo libera a uno de toda atadura kármica”). Deben buscar Karma vimochanam (liberación de la atadura de las propias acciones).

“Sambashanam Sankatanasanam”. Ustedes pueden reconocer la verdad de esta afirmación a partir de la experiencia propia. Quizás algunos duden de que el toque del Señor pueda destruir todos sus lazos kármicos o de que el darshan del Señor pueda destruir todos los pecados. Sin embargo, no puede haber dudas con respecto al efecto de Sambashanam.

Cuando ustedes conversan con Swami, olvidan todos sus pesares. Incluso olvidan sus preocupaciones y los motivos de ansiedad. Esta es la prueba directa de que experimentan la verdad de esta máxima. Mientras conversan con Swami, se encuentran en un estado de bienaventuranza. Cualesquiera sean sus preocupaciones, cuando conversan con Swami en el cuarto de entrevistas, se olvidan de todo. De esto deberían deducir que el darshan del Señor puede destruir todos los pecados, aun cuando ustedes no lo sepan. Muchas personas no reconocen este hecho. La mente es responsable de todas las dificultades y penas. La mayoría de las personas no son conscientes de sus propios sentimientos. Si los pensamientos son buenos, inevitablemente conducirán a buenos resultados.

Los resultados de su karma pasado nacen con ustedes Cosecharán lo que siembren. Este es un hecho ineludible. Si sus pensamientos son de cierta clase, ¿por qué esperan que los resultados sean diferentes? Cuando nacen, el Creador los envía con un collar al cuello formado por los resultados de sus buenas y malas acciones en la vida anterior, computadas con gran detalle.

Si cuando alguien los acusa, ustedes no responden a la acusación en forma similar, sino que la pasan por alto, esta regresa al acusador como una carta certificada que el destinatario se niega a aceptar. Un incidente en la vida de Buda ilustra esta verdad.

Cómo reaccionar cuando se los acusa de algo Había un jefe de aldea a quien no le gustaba la forma de vida de Buda. Lo consideraba un holgazán que reunía jóvenes a su alrededor y los hacía llevar una vida ociosa. Buda, que era consciente de la actitud del hombre, fue a su casa un día con sus discípulos a pedir limosna. “¡Bhavati! Bhiksham Dehi” (“¡Oh, bendito! Ofréceme una limosna”). El jefe, que había estado espiando a Buda mientras este se acercaba a la casa, le gritó:

“¡Tú, holgazán! No mereces ninguna limosna. ¡Vete! Has estado perdiendo tu tiempo”. El jefe continuó insultando a Buda, llamándolo por todo tipo de nombres. Buda, que parecía divertirse, sonreía.

Después de agotar los insultos, el jefe se calmó y le preguntó a Buda: “¡Señor! Tengo una duda. ¿Quieres aclarármela?”.

Buda dijo: “¿Cuál es tu duda? Habla”. El jefe preguntó cómo era que Buda había permanecido impasible ante todos los insultos que él le había dirigido. Buda respondió: “Vine a ti mendigando comida.

Suponiendo que tú hubieras traído la comida y yo me hubiera negado a recibirla, ¿qué habrías hecho con los alimentos?”.

El hombre dijo: “Me los hubiera llevado de regreso”.

Entonces Buda dijo: “Ahora bien, en lugar de comida, tú me diste todos tus insultos. Me negué a recibirlos. ¿Qué les ocurre a ellos? Regresan a ti. Yo no tengo ninguna conexión con ellos”.

El jefe aprendió una buena lección.

No deben preocuparse por la bondad o la maldad de otros.

Tienen que albergar buenos pensamientos y dirigir su mente hacia Dios. La bienaventuranza se obtiene experimentando la unidad con lo Divino.

El mensaje Vedántico de unidad ha sido tergiversado por individuos que promovieron tendencias divisivas. El mensaje supremo de los Vedas es la unidad, como lo proclama el mantra “Sahana vavatu, Sahanau bhunaktu, Saha viryam Karavavahai” (“Que todos juntos seamos protegidos. Que nos nutramos juntos.

Que trabajemos juntos con gran energía”).

Trabajemos todos juntos. Solo entonces habrá paz. (Swami recitó un poema telugu que transmitía el sentido de la estrofa sánscrita del Shvetashvatara Upanishad). ¡Qué gran mensaje transmite esta plegaria! No obstante, los pandits están interpretando el mensaje de formas diferentes y provocando divisiones.

Vedamata (la Madre Veda) procuró fomentar la unidad y una visión universal mediante su mensaje que lo abarca todo.

Llenen el corazón de amor y de sentimientos Divinos Hoy el hombre incorpora todo tipo de conocimientos en la cabeza en forma distorsionada y se comporta como un demente.

Llena su mente con todo tipo de cosas acerca del mundo, con cualquier cosa que lea o que oiga. Cuando se levanta a la mañana, comienza a leer el diario para saber qué está ocurriendo en un país u otro y atiborra su mente con un montón de basura.

¿Acaso llena su corazón con algún sentimiento divino? En lugar de llenarse la cabeza con una cantidad de disparates, debería tratar de llenar su corazón de amor. Sin amor en el corazón, ustedes son solo otro diario. Desde que se levantan hasta que se van a dormir, el día está marcado por tomar el desayuno, el almuerzo y la cena. ¿Qué sentido tiene complacerse en esta rutina repetitiva día tras día? ¿Qué es lo nuevo que deberían hacer? Es la contemplación de Dios. ¿Están haciendo algún esfuerzo en ese sentido?

La ciencia y la tecnología avanzan con rapidez. Están penetrando las profundidades del espacio. ¿Pero se está haciendo el más leve esfuerzo para explorar las profundidades del corazón?

El hombre no se ha movido ni un centímetro para comprender su corazón.

Los científicos no adquieren ninguna experiencia sobre la vida El hombre descubrirá la verdad explorando lo interno y no, viajando lejos por el espacio. Toda la preocupación de la ciencia se centra en el estudio de la materia.

¿Qué es lo que encuentran cuando hacen largos viajes por el espacio? No hay nada allí. Si necesitan aire, tienen que llevarlo desde la Tierra. ¡De este modo, los viajes espaciales se han vuelto una especie de picnic! Llevan todo lo que necesitan desde aquí. No hay nada allá. El agua que necesitan y el alimento que requieren están a sus pies. Todos los metales, los diamantes, o cualquier otra cosa que quieran, están todos bajo sus pies. Por encima de la cabeza (en el espacio), no hay nada.

Gastan millones para salir al espacio, pero, cuando necesitan comida, tienen que regresar a la Tierra.

Una función de la ciencia es comprender cómo funcionan los sentidos. Si no se sabe cómo controlar los sentidos, ¿de qué sirven todos los demás conocimientos de la ciencia? Muchos científicos finalmente terminan ganándose un lugar en los hospitales para enfermos mentales. Enterrándose en un oscuro laboratorio y llevando a cabo experimentos durante toda su vida, mueren sin haber adquirido ninguna experiencia sobre la vida.

Sigan al corazón, no a la cabeza ¡Estudiantes! Cuiden su corazón. No sigan a la cabeza. Pongan en su cabeza todo lo que sea útil, pero transmítanlo al corazón.

Eso generará verdadera energía. Eso es Sat. Eso es energía imperecedera. Lo que se recibe en la cabeza viene y se va. La cabeza busca felicidad, pero esta felicidad es temporaria.

Es la satisfacción de necesidades y deseos a medida que surgen, de instante en instante. Si tienen hambre, ingieren alimento y se sienten felices. Sin embargo, esto solo dura unas pocas horas hasta que sienten hambre nuevamente. Esta clase de felicidad viene y se va. Este proceso se relaciona con la cabeza.

Sin embargo, el corazón se ocupa de obtener bienaventuranza perdurable.

Deben comprender la diferencia entre la cabeza y el corazón.

La cabeza se contenta con cumplir con obligaciones temporarias.

El corazón se ocupa de lo que es permanente. Una vez que se obtiene la bienaventuranza, también se obtendrá todo lo que la cabeza busca.

¡Estudiantes! La historia del emperador Bali les enseña que en ninguna circunstancia deben ir en contra de la palabra dada.

Bali estaba dispuesto a ignorar el consejo y la advertencia del guru Sukracharya, para cumplir la promesa hecha a Vamana, aunque le costara el reino o la vida.

La verdad es el alimento que sostiene el habla. Del mismo modo, ustedes deben alimentar sus sentidos con alimento sano, escuchando cosas sagradas, viendo lo que es sagrado y hablando sobre lo que es verdadero y bueno. Consumir alimento sano por la boca no es suficiente. Todo lo que reciben a través de los sentidos debe ser puro.

Dediquen el período dulce de sus vidas a Dios ¡Estudiantes! Este es el período más sagrado de sus vidas.

Es un período dulce. Es un tiempo que debería dedicarse a lo Divino. ¿Acaso alguien ofrece un fruto verde o demasiado maduro a la Divinidad? Solo un fruto maduro, rico en dulce jugo, es ofrecido a Dios. Ustedes no son ni un fruto verde ni un fruto echado a perder. Son un fruto bueno y maduro. Ese fruto ha de ser ofrecido a Dios. Ese es el sacrificio apropiado que uno debe hacer en su vida.

Los Upanishads han proclamado que la inmortalidad se alcanza solo mediante el sacrificio y no, a través de buenas acciones, progenie o riquezas. Ustedes no pueden llevarse al morir ni siquiera un puñado de tierra. Por lo tanto, hagan ahora el mejor uso de sus años llevando una vida desinteresada y dedicada. De este modo, deberán obtener la gracia de Dios y compartirla con otros. Este es el secreto de una vida que tiene sentido.

Discurso pronunciado en el Kalyana Mandap, en Brindavan, el 15-3-1992.