.



 

Discursos dados por Sai Baba

19. 02/06/91 Vijñana y Dharma

Vijñana y Dharma

Vijñana y Dharma

2 de Junio de 1991

Cada país desarrolla su propio sistema de Vijñana (conocimiento).

Sin embargo, en todos los sistemas hay ciertas buenas características comunes a todos, como la moralidad, el carácter, la verdad, el sacrificio y la tolerancia. El sistema de educación Bharatiya contiene cinco elementos: la conducta, la tradición, la religión, el arte y el estudio. Los educadores de hoy no tienen en cuenta este programa completo para la adquisición de conocimiento. El valor de este sistema de conocimiento se mide por el grado de rectitud que promueve. El progreso del conocimiento en el mundo es determinado por el progreso de la rectitud. El bienestar y el adelanto de un país dependen del progreso combinado de Dharma y Vijñana.

Vyasa y Valmiki fueron grandes sabios. Mediante sus obras poéticas, propagaron entre la gente la rectitud y el conocimiento supremo, que les haría adorar al Señor Supremo, el dador de todos los dones. Sus obras son antiguas y han sido descritas como puranas, debido a su antigüedad.

El mantra unificador de la cultura bharatiya El Mahabharata y el Ramayana enseñan las leyes de la rectitud no sólo a Bharat sino al mundo entero. Desde los tiempos más remotos, la cultura bharatiya ha estado promoviendo la seguridad y la prosperidad en todos los países. Trascendiendo todas las diferencias de nacionalidad o religión, la cultura bharatiya enseñó al mundo el mantra unificador: “Lokas samastas sukhino bhavantu” (Que todos los mundos sean felices). Este mensaje trasciende las barreras del tiempo, el espacio y las circunstancias y predica la doctrina de la unidad. Únicamente Bharat ha predicado el principio amplio de la felicidad de todos los pueblos en todas partes, renunciando a la idea del “Yo” y de “mi pueblo”.

¿Cuál es el significado interno de que Vyasa, sin tener en cuenta la riqueza, el poder, la fuerza física y las habilidades de Duryodhana, Dussasana y otros estimara sólo a Dharmaja (el mayor de los Pandavas)? Los grandes hombres de aquellos días tenían el respeto más alto por el Dharma (la Rectitud), consideraban que el Dharma era el único poder sustentador del mundo, y creían que todas las instituciones de Bharat debían basarse en el Dharma. Debido a su respeto supremo por el Dharma, Vyasa tenía en alta estima a Dharmaja.

El Ramayana, que enseñó al mundo entero la grandeza de la moralidad y la integridad, debería ser el aliento vital de cada familia. Cómo han de conducirse los hermanos en una familia, cómo debe un hijo cumplir con los mandatos del padre, cómo deben los esposos vivir en armonía: todos estos aspectos de la vida familiar son expuestos en forma excelente en el Ramayana.

El Ramayana enseñó cómo debe promoverse la unidad entre los hermanos mayores y menores, cómo debe prevalecer el afecto entre los parientes y cómo debe protegerse la reputación de la familia. El autor del gran Ramayana es Valmiki.

Rama es la verdadera imagen del Dharma Ravana era alguien dotado de toda la riqueza y prosperidad.

No le faltaba nada en términos de comodidades y lujos. Dominaba las 64 categorías de conocimiento. Su capital, Lanka, competía con el mismo Svarga (cielo) en grandeza. En vez de mostrar respeto por Ravana, Valmiki elogiaba a Rama, quien renunció al reino, vistió la túnica de un asceta y vivió una vida simple en la selva. ¿Cuál fue la razón? Fue porque Rama era la misma encarnación del Dharma. Cada una de sus acciones emanaba del Dharma. Cada palabra que pronunciaba era verdad.

Cada paso que daba se basaba en el Dharma. Por eso, Rama ha sido descrito como la misma imagen del Dharma (Ramo Vigrahavan Dharma).

¿Cuál es el significado interno de que los grandes sabios no asignaran valor alguno a la riqueza, las posesiones o las capacidades intelectuales, y consideraran sólo a la rectitud como de supremo valor? Esto muestra el interés que tenían en demostrar al mundo la verdad de que el mundo se basa en el Dharma y que el Dharma es vital para la vida del hombre.

En el concepto bharatiya de los Purushartas, los cuatro objetivos de la vida humana –Dharma, Arta, Kama y Moksha– el Dharma (la Rectitud) viene primero. Sólo cuando la búsqueda de Arta (prosperidad material) y Kama (los deseos) se base en el Dharma, el hombre tendrá felicidad genuina. Si él va en busca de Arta y Kama sin consideración por el Dharma, se hundirá en la miseria. Por lo tanto, la adquisición de riqueza debe basarse en el Dharma. Del mismo modo, Kama debe estar imbuido de Dharma. Sólo entonces, los deseos conducirán a Moksha (la liberación). Ésta es la verdadera lección que enseñan los Purushartas.

Desafortunadamente, hoy las personas han cortado los pies (Dharma) y la cabeza (Moksha) de los Purushartas y están llevando vidas que se basan únicamente en Arta (la riqueza) y Kama.

Ésta es la razón por la que el país es víctima de toda perturbación concebible. Debido a que la gente ha olvidado el Dharma, todo el país lleva el manto de la maldad.

En tal condición, los estudiantes deben comprometerse a adquirir conocimiento basado en el Dharma y a usar ese conocimiento para promover el progreso de la nación y elevarla a alturas gloriosas.

Comprendan el verdadero mensaje del Gita El mensaje del Bhagavad Gita ha sido interpretado de muchas formas diferentes por los eruditos. Ellos han sostenido que el Gita prescribe como senda primordial al Karma Marga, el Jñana Marga o el Bhakti Marga. Sin embargo, el verdadero mensaje del Gita se encuentra en la primara palabra del primer sloka, “Dharma”, y en la última palabra del último sloka, “Mama”. “Mama Dharma” (cada individuo tiene que cumplir con su deber) es la lección del Gita. Los jefes de familia deben seguir el Grihasta Dharma (los deberes de un jefe de familia), los ancianos deben seguir el Vanaprasta Dharma (los deberes de aquellos que se han retirado de los deberes familiares). Están el Sanyasa Dharma (los deberes de un renunciante) y el Brahmachari Dharma (los deberes de un célibe durante los años anteriores al casamiento).

Estos deberes son prescritos para cada uno en su etapa particular de la vida y no deben ser mezclados. El Gita enseñó estos deberes para personas en diferentes asramas (etapas).

La base para todos los dharmas es el Manu Dharma Sastra (el Código de Manu). No hay en ningún lugar del mundo un código de conducta que pueda igualarse al establecido por Manu.

La grandeza del “Manu Dharma Sastra” Una vez, un filósofo alemán llamado Nietzsche escribió un libro titulado “La Voluntad de Poder”. Mientras se dedicaba a escribir su libro, vio una copia del “Manu Dharma Sastra”. Al leer el libro experimentó una dicha inexpresable y dejó a un lado su propio escrito. Él comentó: “Cuando el Código de Manu está brillando en el firmamento con la refulgencia del sol, el libro que estoy escribiendo es como una vela. No se puede encontrar en el mundo entero un tratado como éste”.

Si estos grandes libros sagrados y tratados morales están disponibles dentro de Bharat, ¿por qué los bharatiyas están yendo tras ideas y prácticas exóticas pasando por alto su propio dharma? Hay una especie de falsa fascinación en esto. Si uno es atraído por las doctrinas de otros, aunque posea invalorables gemas y preciosas verdades, se vuelve víctima de tales males.

Hay un adagio telugu que dice que un hombre prefiere la comida rancia del vecino a las exquisiteces de su propia casa.

¿Puede haber una locura más grande que pasar por alto los tesoros incomparables de la propia herencia cultural e ir tras el oropel de otros países?

El conocimiento debe promover la personalidad humana ¡Estudiantes! El conocimiento desarrollado por cada país es esencial para ese país. Esto no debe ser desestimado. De acuerdo a sus circunstancias históricas y a los requerimientos del lugar y la época, cada país desarrolla su propio bagaje de Vijñana (conocimiento).

Nadie tiene derecho a criticarlo. Cada país desarrolla su propio código de rectitud y su colección de conocimientos y cultura a base de sus condiciones y necesidades y ésta es la prueba de su validez. No obstante, cada sistema de conocimiento ha sido concebido para promover la personalidad humana. El sistema indio tiene el propósito de promover lo que es sublime y ejemplar en la naturaleza humana. Sin considerar este aspecto de promover la excelencia humana y ayudar a la gente a llevar vidas ideales, el mero estudio de los antiguos textos es inútil. Lo que se aprende de los libros debe ser puesto en práctica. Sólo entonces se experimenta la verdadera bienaventuranza del conocimiento.

Si se estudian innumerables libros pero no se cultivan buenas cualidades, ¿de qué sirve ese estudio? Las cualidades son lo más importante. Desde los tiempos más remotos, nuestros ancestros dieron importancia a las buenas cualidades.

Ningún científico está calificado para criticar los textos indios de filosofía y metafísica. Hoy, la ciencia afirma haber descubierto alguna verdad, que en investigaciones posteriores resulta ser indefendible. Una ciencia que está continuamente revisando sus teorías no puede erigirse en juez de las verdades eternas presentadas por los sabios indios en el Vedanta. Si examinan las especulaciones de los filósofos europeos desde Kant hasta Spencer, descubrirán que comparadas con el torrente de pensamiento filosófico presentado por las tres escuelas de Vedanta –Dvaita (Dualismo), Advaita (No dualismo) y Visishtadvaita (No dualismo calificado)– las especulaciones de estos filósofos son un delgado hilo de agua.

Todas las exploraciones de la ciencia moderna no son más grandes que las que Hiranyakasipu y Hiranyaksha llevaron a cabo hace eones. Hiranyakasipu exploró la tierra, el cielo y los cinco elementos y se sentía tan orgulloso de su domino sobre todos los elementos que persiguió a su propio hijo (por no reconocer sus poderes). ¿Qué es lo que ocurre cuando uno adquiere dominio sobre los elementos físicos? Desarrolla su ego y olvida su verdadera naturaleza. El hijo, Prahlada, adoraba a Hari. El padre, Hiranyakasipu, odiaba a Hari. No puede haber un terreno común entre estos dos. Del mismo modo, no hay un terreno común entre la filosofía y las ciencias físicas de hoy.

La lección enseñada por el Avatar Narasimha “¿Dónde está tu Dios?”, preguntó Hiranyakasipu. Prahlada respondió: “No tengas ninguna duda de que Él está aquí y también allí”. “¿Él está en esta columna?”. “Sí”, respondió Prahlada.

Cuando Hiranyakasipu golpeó la columna con su maza, un poder divino emergió de ella. La lección de este episodio es que, a menos que el hombre haga añicos las columnas de su ego, no será capaz de descubrir lo Divino dentro de sí. Mientras el hombre esté lleno de conciencia corporal, no podrá experimentar lo Divino. Sólo cuando se libere de la conciencia corporal será capaz de comprender lo Divino dentro de sí.

Sin duda, es necesario dedicarse al estudio de las ciencias físicas. Sin embargo, uno no debe llenarse de orgullo debido a sus conocimientos científicos. Tomando conciencia de que aún hay innumerables cosas más por conocer, los científicos deben cultivar la humildad y la modestia.

¡Estudiantes! Ustedes son los futuros líderes de la nación.

La prosperidad o el infortunio dependen de cómo se comporten.

Si son buenos, la nación será buena. Si se comportan mal, la nación sucumbirá. Tienen que comprender el verdadero papel de la ciencia. Hoy, un estudiante, después de adquirir una cantidad de conocimiento del tamaño de una semilla de mostaza, desarrolla una cabeza hinchada del tamaño de una calabaza.

Esto está absolutamente mal. En lugar de predicar una tonelada de preceptos a otros, harían bien en practicar una pizca de ellos ustedes mismos. La práctica debe preceder al precepto.

De este modo, Bhartiya Vijñana (el conocimiento bharatiya), que contiene la esencia de todos los Sastras (escrituras), estableció el objetivo de todos los esfuerzos humanos en la forma de un divino sutra (máxima).

El estrecho lazo entre Vak y la Divinidad Todo este cosmos está formado por dos componentes: uno es el nombre y el otro es la forma. No hay nada que pueda percibirse que carezca de nombre o forma. El nombre implica sonido.

El sonido satura el universo. El sonido recibe el nombre de Vak (palabra o habla). Para la palabra, el prana (la vida) es bhava (sentimiento). Para el sentimiento, la vida es deseo. Para el deseo, la vida es Ajñana (ignorancia). Para la ignorancia, la Divinidad es la fuente de vida. Tienen que reconocer el estrecho lazo que hay entre Vak y la Divinidad.

Sin palabras no pueden identificar nada. Cada objeto posee un sonido (o nombre) asignado a él. Todas las cosas se originaron del sonido. Ustedes no han creado el sonido. Por lo tanto, desde los tiempos remotos cada sabda (sonido) tuvo un significado específico. Estos significados no son la creación de ningún científico. Por ejemplo, he aquí un platillo. ¿Quién hizo este platillo?

Un orfebre pudo haber hecho el platillo, ¿pero quién le dio su nombre? Puede decirse que el nombre vino del pasado. He aquí un vaso. Recibe el nombre de vaso debido a su forma. Así, es evidente que el nombre está asociado con la forma de un objeto.

Para la forma, la prueba es el nombre. Los dos son interdependientes e inseparables. Deben reconocer esta verdad.

Para cada palabra en el mundo hay una forma. ¿Cuál es entonces la forma de la palabra Duhkham (el pesar)? Las dificultades que experimentan son su forma. Para Ananda (la bienaventuranza), la dicha que experimentan es la forma. Éste es un “salón”. La forma le da el nombre. Para cada palabra hay una forma.

Dios debe ser realizado por Su nombre Los científicos no reconocen la lógica implícita en esta verdad.

Por ejemplo, ustedes tienen un diccionario. Contiene numerosas palabras y da sus significados. ¿Acaso no acepta quien lo usa, los significados dados en él? El diccionario incluye la palabra “Dios”. Esta palabra debe tener una forma. Si no tuviera forma, ¿cómo podría haber cobrado existencia la palabra?

¿Por qué no se reconoce este hecho? Se debe a los prejuicios individuales y no se aplica a la generalidad de la gente.

Se puede sostener cierta opinión (sobre Dios) sobre la base de las propias preferencias personales.

Hay sólo dos cosas en el mundo: el nombre y la forma. Por eso, el Vedanta indicó que Dios debía ser realizado por Su nombre. Es difícil tomar conciencia de la forma a partir de la descripción de la forma. Por ejemplo, si una persona es descrita como alguien que viste con camisa y corbata y es de cierta altura, no pueden hacer que alguien responda a esa descripción en una muchedumbre. Sin embargo, en el instante en que se menciona el nombre y se dan las características de identificación, la persona puede ser encontrada en una multitud de cientos de miles. A través del nombre, la forma puede ser visualizada fácilmente. Por eso, el Sruti declaró: “Smarane Taranopayah” (La recordación del nombre es el medio de redención).

¡Estudiantes! Bhartiya Vijñana (el conocimiento supremo) abarca todas las potencias. Ningún otro sistema de conocimiento contiene lo que se encuentra en Bhartiya Vijñana. Ustedes no poseen este conocimiento. No han tratado de ponerlo en práctica. En consecuencia, no tienen idea de su valor prodigioso.

Procuren conocerlo y darle un uso adecuado. Así, experimentarán bienaventuranza.

El Dharma es la primera máxima de la vida Bharatiya Vijñana está impregnado de Dharma (Rectitud). El Dharma es la primera máxima de la vida. Es la vida misma.

¿Qué es el Dharma? Se dice: “Dharayati iti Dharmah” (Dharma es aquello que lo sostiene todo). Esta derivación no es adecuada.

En cada objeto, hay un principio vital que lo atraviesa como un hilo.

Aquí hay “fuego”. ¿Qué contiene ese “fuego”? Calor y luz.

Sólo cuando el calor y la luz están presentes, se lo puede considerar como Agni (fuego). Si el calor y la luz no están presentes, será un trozo de carbón y no fuego. ¿Cuál es entonces el Dharma (el principio vital) del “fuego”? Manifestar calor y luz.

He aquí un trozo de hielo. ¿Cuál es su forma? Es blanco. Es frío. Si no fuera frío dejaría de ser hielo. Del mismo modo, el principio vital del azúcar es la dulzura. Si no tiene dulzura, se convertirá en sal o barro.

El Dharma del hombre es una vida de sacrificio ¿Cuál es el Dharma del hombre? Una vida de sacrificio sobre la base de la moralidad y la integridad es el Dharma del hombre.

¿Cómo se ha de practicar el Dharma? Con Trikarana Suddhi (pureza de pensamiento, palabra y acción). La verdadera condición humana consiste en la armonía de pensamiento, palabra y acción. Hoy, debido a que no hay unidad de pensamiento, palabra y acción entre los hombres, el Dharma ha declinado. Como resultado, Vijñana (el conocimiento superior) ha perdido su verdadera forma. La prosperidad y el bienestar de la nación han sido destruidos. La seguridad se ha vuelto escasa. La moralidad y la integridad han desaparecido. La adoración de Mamón prevalece por encima de todo. En la búsqueda insana de riquezas, los hombres están perdiendo su moralidad e integridad.

El dinero obtenido por medios indignos no es otra cosa que polvo. Esa riqueza no les será de utilidad. Acumular riquezas no sirve de nada. La riqueza mal habida no es realmente de ustedes.

Hay cuatro elementos codiciosos esperando obtenerla. La primera entidad es el gobierno. En nombre de algún impuesto o ley, el gobierno se apoderará de la riqueza acumulada. La segunda entidad es el fuego: de algún modo u otro, el fuego llega a la riqueza mal habida y la destruye. La tercera entidad es un ladrón. El ladrón va tras la riqueza escondida. De algún modo él trata de robarla. La cuarta entidad es la enfermedad. Para despojar a una persona de su riqueza mal habida, la enfermedad se apodera de ella y le hace gastar el dinero en tratamientos.

Los avaros, que no le dan ni un centavo a un mendigo, gastarán cualquier cantidad en médicos y medicinas. Éstas son las formas en las que el dinero obtenido por medios deshonestos es quitado.

Por lo tanto, estudiantes, ustedes que son la esperanza del futuro de la nación deben abstenerse rigurosamente de utilizar medios injustos para ganar dinero, deben adherirse a la moralidad y la integridad en su vida profesional, defender el Dharma a través del amor y la verdad y servir a la nación. Sólo entonces ella recuperará su antigua grandeza y gloria. Es imposible para alguien erradicar las verdades básicas que contienen la cultura y la tradición bharatiya.

Dedíquense a orar por el bienestar del mundo Para todo, la base es la devoción hacia el Señor. Sin devoción, nada puede lograrse. Sólo el poder de lo Divino puede salvar al mundo y no algún tanque, bomba o gobierno. Por lo tanto, dedíquense a orarle a Dios por el bienestar del mundo.

Siempre canten el nombre del Señor. No pierdan tiempo porque el Tiempo es la encarnación de Dios. Traten de ser de ayuda a otros en todas sus actividades. No hay mayor sadhana o puja que éste. No es necesario instalar una imagen del Señor en sus pequeños altares para adorarlo. Instálenlo en sus corazones y adórenlo.

La adoración externa del Señor tiene sus riesgos. Mira era una gran devota. Fuera de Krishna, ella no veía otra cosa en el mundo. Sin embargo, tenía un deseo basado en lo externo.

Quería instalar una imagen de Krishna en un templo y complacerlo con sus cantos durante todo el día. ¿Cómo podía ella construir un templo? Estaba más allá de sus medios. Se preguntaba si acaso le sería posible hacerlo en el transcurso de su vida. Estaba llena de dudas como éstas. Un día, el Maharana (de Udaipur) la vio y deseó casarse con ella. Mira no tenía deseos de casarse ya que su objetivo principal en la vida era otro.

Vio que el Maharana era una persona poderosa y fabulosamente rica. Sintió que si se casaba con él podría cumplir su deseo más profundo. Al casarse con el Maharana, podría obtener un templo construido con mármol, instalar en él una imagen de Krishna de mármol, dedicar todo su tiempo a la adoración de Krishna y santificar su vida. Engañada por este deseo, se expuso a la decepción.

Después del casamiento, el Maharana se disgustó con su forma de vida y le pidió que dejara el mandir. Éste fue un gran golpe para Mira. Sentía una profunda agonía. Al mismo tiempo, fue un gran momento de verdad para ella. Comprendió que el mandir había sido construido por el Maharana y estaba expuesto a sufrir deterioro en un momento u otro. “Pero el templo de mi corazón ha sido erigido por el Señor. Dios está instalado en él.” Mira recordó la promesa de Krishna a Narada: “Dondequiera que Mi gloria sea cantada, allí estaré”. Ella se dirigió a su mente de este modo: “Oh, mente, ve a donde se juntan el Ganges y el Yamuna”. ¿Dónde está la unión de estos dos ríos? Está en el entrecejo (Swami cantó la canción de Mira).

Los estudiantes deben redimir a la nación Hoy sólo la gracia de la Divinidad puede salvar al país del caos y el desorden en los que está hundido. La paz y el progreso en el futuro dependen de las capacidades y los esfuerzos de los estudiantes. Cuando un país, conocido por su grandeza espiritual durante milenios, está agobiado por la corrupción, la violencia y la injusticia, es el privilegio de los estudiantes redimir a la nación mediante la práctica de la verdad, la rectitud, el amor y la tolerancia para asegurar la paz y la seguridad en el país. Hoy se necesitan miles de estos estudiantes.

Un solitario Prahlada pudo intentar transformar sólo a su padre.

Todos ustedes deben intentar transformar a sus padres mediante su propia vida ejemplar y hacerles llevar vidas nobles.

Todos ustedes deben ejemplificar la vida de Prahlada. Él era un muchacho de la edad de ustedes. Era un estudiante como ustedes.

Hasta sus maestros eran hombres buenos. Sin embargo, debido a la naturaleza perversa del padre y a sus amenazas, ellos trataron de enseñarle cosas malas a Prahlada. No obstante, Prahlada se arriesgó incluso a enseñar a sus preceptores.

Ellos estaban tan influidos por las enseñanzas de Prahlada que se acercaron a Hiranyakasipu y le dijeron: “¡Oh, Señor de los Rakshasas! Tu hijo no es un muchacho común. Está dotado de grandes cualidades. No es correcto que tú castigues a un muchacho así”.

Cuando los esbirros del rey le lanzaron sus jabalinas, Prahlada no se encogió ni emitió grito alguno, sino que sólo le oró a Vishnu, llamándolo “¡Oh Pannagasayi!” (¡Oh, Señor, que descansas sobre el lecho de serpientes! (Poema). Se mantuvo siempre sonriente. Cuando fue arrojado dentro de un fuego llameante, continuó glorificando serenamente el nombre de Narayana.

Cuando fue empujado al mar, continuó recitando el nombre de Narayana. No estaba preocupado por el deha (cuerpo).

Estaba sumido en la contemplación del Dehi (el Espíritu Morador Interno). Un muchacho como ése es suficiente.

La sabiduría debe brillar en la educación Por lo tanto, en este mundo que está haciendo tantos avances científicos y tecnológicos, los estudiantes deben vivir una vida dedicada a la verdad. Anil Kumar (en su discurso anterior) observó que educación no significa el mero estudio de libros.

Así como el relámpago que fulgura entre las nubes, la sabiduría debe brillar desde su educación. Consideren a su corazón como el cielo. En ese cielo, sus pensamientos son las nubes.

La mente es la luna, su intelecto es el sol. En estos años de juventud, es probable que nubes oscuras se junten en sus corazones.

En ese momento, el sol y la luna no serán visibles. ¿Pero por cuánto tiempo? Sólo por un breve período. Las nubes son nubes pasajeras, no permanentes. Si tienen paciencia, las nubes pasarán y entonces serán capaces de ver su verdadero Ser. Entonces sus mentes e intelectos brillarán con intensidad.

Por lo tanto, para experimentar paz, cultiven la paciencia y la tolerancia.

En la actualidad, los estudiantes son propensos a alterarse fácilmente. No se permitan ceder ante las provocaciones. Hoy el mundo estudiantil está lleno de agitaciones. Esto parecería acompañar al período de la adolescencia. Sin embargo, no deben considerarlo así. Desde los años de la adolescencia, ustedes deben desarrollar todas sus facultades y talentos. Deben practicar el control de los sentidos desde esta misma etapa.

¿Qué clase de disciplina es posible en la vejez?

No pospongan la espiritualidad para la vejez Hay algunas personas que preguntan: “¿Qué necesidad hay de pensar en Dios a esta edad? ¿No es suficiente si empezamos a pensar en Dios después de obtener un empleo, ganar dinero y retirarnos del trabajo?”. Hay algunos que declaran que se dedicarán a las actividades espirituales después de su retiro.

Sin embargo, en realidad, buscan otros trabajos después del retiro y continúan trabajando hasta el final de sus vidas. No renuncian al deseo por el dinero. ¿Cuándo emprenderán la senda espiritual? “¿Es posible pensar en Hari cuando los mensajeros del Señor de la Muerte han atrapado la vida del hombre en su lazo, cuando los parientes están apurados por sacar el cadáver de la casa y cuando la esposa y los hijos están sollozando junto al cuerpo?” (Poema). Es imposible pensar en el Señor en ese momento. Por lo tanto, tienen que comenzar a adorarlo desde esta edad misma. Desde ahora mismo deben llenar sus corazones con amor por lo Divino. Pueden hacer uso de su devoción en su vejez. Ésta es la tarea que tienen por delante.

Combinen la espiritualidad con lo académico Sin importar lo que alguien pueda decir, combinen la búsqueda espiritual con sus estudios académicos. No pueden hacer andar el carro de la vida sobre una sola rueda. Es demasiado riesgoso. Ningún ave puede volar con una sola ala. Puede volar libremente cuando es capaz de usar ambas alas. Del mismo modo, el hombre necesita el conocimiento mundano para ocuparse de los asuntos mundanos y Brahma-Vidya (el conocimiento espiritual) para su bienestar espiritual. Adquieran conocimiento de las ciencias físicas; eso es necesario. Al mismo tiempo, busquen también la sabiduría espiritual. Tienen que conducir sus vidas sobre la base de ambos tipos de conocimiento.

¡Estudiantes! No dediquen todo su tiempo únicamente a asuntos mundanos. Dediquen algo de tiempo a lo que es esencial para alcanzar el objetivo más elevado de la vida. Sólo cuando el país esté lleno de tales estudiantes, será próspero y feliz y recuperará su antigua gloria. Sólo el poder de lo Divino puede proteger a cualquier individuo, sociedad o nación. Busquen realizar ese poder divino. No se lo puede obtener afuera. Es inherente a ustedes. Por eso los textos Vedánticos declaran: El Único Señor habita en todos los seres”.

Discurso en el Auditorio del Instituto, Brindavan, el 2 de junio de 1991.