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Discursos dados por Sai Baba

25. 21/11/86 El Equipo para el Servicio

El Equipo para el Servicio

El Equipo para el Servicio

21 de Noviembre de 1986

Hoy en día, ocupados en chismorreos y en observar escenas de violencia y crueldad, los hombres desaprovechan y pierden una gran porción de sus preciosas vidas; culpan al tiempo, porque es demasiado poco o porque pasa demasiado rápido para satisfacer la galopante codicia. Los hombres no tienen conciencia de que el tiempo santificado por el servicio les ofrece altas recompensas tanto a ellos mismos como a aquellos a quienes sirven. No todo acto de servicio es igualmente santificado o uniforme en los beneficios que confiere. Cuando el servicio es emprendido por gente ansiosa de poder o bajo compulsión o por impulsos imitativos, resulta más dañino que beneficioso. El autoengrandecimiento, la competición o la ostentación son motivos que contaminan el sagrado sadhana del servicio. Por ello, se debe evitar el egotismo (ahamkara), el exhibicionismo (adambara) y el engreimiento (abhimana).

Antes de emprender un proyecto de servicio deben hacer una introspección y examinar su equipamiento para ello: si su corazón está lleno de amor desinteresado, humildad y compasión, si su cabeza está llena de comprensión inteligente y conocimiento del problema y su solución, si sus manos están ansiosas de ofrecer el toque sanador y si puede dedicar y compartir con alegría el tiempo, la energía y la destreza para ayudar a otros en extrema necesidad.

El servicio debe estar libre de apego Estas cualidades pueden brotar y crecer sólo cuando la realidad de la Unidad es implantada en la conciencia. Todos los hombres, todos los seres vivientes son células en el cuerpo de Dios. Su origen, continuada existencia y progreso están todos en Dios, por Dios y para Dios. El individuo es una unidad en esta unidad. No hay otros extraños. Cuando uno está enfermo, todos sufren. Cuando uno está feliz, todos participan de esa felicidad. La fe en esta verdad es el equipamiento fundamental que el servidor debe adquirir.

Los líderes y guías de las organizaciones de servicio e instituciones y actividades están ofreciendo caridad, diciendo que están motivados por la generosidad y aceptan el homenaje de los receptores. Esta es la razón por la cual ese servicio en todo el mundo no da resultados duraderos.

A fin de merecer el nombre sagrado de Seva, servicio, la actividad debe estar libre de todo apego al Ser y basarse en una fe firme en el residente Divino en cada ser. El seva debe considerarse como una adoración de la forma que Dios ha asumido para dar al servidor la oportunidad de adorarlo. Cuando un hambriento nara (hombre) es servido con una buena comida, lo que se está haciendo es Narayana Seva, pues, nara (el hombre) es sólo “una forma y un nombre” proyectado por la ignorancia humana (maya) sobre Narayana o Dios.

Ésta es una reunión de miembros de la Rama de Servicio (Seva Dal) que se dedican al servicio entre la población rural de este país. Están ahora ocupados con lo que se llama un taller (workshop, en inglés). No permitan que sus actividades de servicio se conviertan en tiendas (shops) que se concentren en mostrar vitrinas a fin de atraer atención y patrocinio. El servicio hecho a los aldeanos que carecen de los medios para llevar vidas decentes atrae la gracia Divina, más que el servicio en cualquier otra parte. Den una mano auxiliadora a los indefensos que están afligidos con muchos males e impedimentos.

Sólo la acción puede inspirar la acción Pero antes de intentar aconsejarlos, deben esforzarse por aconsejarse a sí mismos; antes de aventurarse a reformarlos, refórmense ustedes mismos. Deben tener cuidado de no alardear ante ellos acerca de su superioridad. Los ofenderá y mantendrá alejados. No se dediquen a dar conferencias. Sólo la acción puede inspirar la acción. Sólo el ejemplo puede instruir. La locuacidad es un ejercicio infructuoso.

Las actividades de servicio pueden prosperar en todos los países, sólo por medio de una dedicación desinteresada. La fanfarria es una señal de insinceridad. Sólo el trabajo silencioso, sin mácula, puede atraer. El aldeano tiene suficiente sentido común para ver a través de todo el show. Recuerden que, aunque iletrado, está consciente de los ideales propuestos por las Escrituras, los santos y sabios de esta tierra, el núcleo de la Cultura Bharatiya. La astuta propaganda puede lograr algunos resultados esporádicos, pero a la larga, traerá decepción y desilusión. Como los “cohetes” encendidos por los niños en la noche de Di pavali, estallará y se apagará.

Hoy en día, estamos confrontados en todas partes con estadísticas que exhiben, en términos brillantes, cantidades e informes.

No se preocupen por sumar números o alcanzar una meta. Yo valoro la calidad, no la cantidad. Un servicio intensivo y genuino, servicio devocional ofrecido en unas pocas aldeas, es más fructífero que contactos casuales y servicio superficial ofrecido a un gran número de ellas.

Convénzanse de que la vida no puede continuar por mucho tiempo sin que otros les sirvan y ustedes les sirvan a otros. Amo y sirviente, gobernante y gobernados, gurú y discípulo, patrono y empleado, padres e hijos, todos están unidos por el servicio mutuo.

Cada uno de ellos es un servidor, un sevak. El granjero y el trabajador a quien sirven producen con su esfuerzo su alimento y su ropa como servicio para ustedes. Recuerden que el cuerpo, con su complejo de sentidos-mente-cerebro les ha sido otorgado para usarlo en ayuda a los indefensos. El servicio es el más alto de los senderos de la devoción y el que gana la gracia de Dios. Promueve la pureza mental, disminuye el egoísmo y le permite a uno experimentar, por medio de una comprensión simpática, la unidad de la humanidad. Por lo tanto, Yo bendigo sus actividades de servicio en las aldeas de su madre patria.

Discurso en el Auditorio Purnachandra, el 21-11-1986.